La candidata socialista a la alcaldía de Girona, Sílvia Paneque, ha asegurado hoy que es «indispensable resolver la mala reforma de la calle de la Creu para solucionar los problemas de seguridad que presenta y para que este espacio de la ciudad se pueda presentar como un ejemplo de urbanismo sostenible y un referente en la distribución del espacio circulatorio entre peatones, formas de movilidad personal y vehículos de motor». Paneque se ha comprometido de nuevo a remodelar la calle de la Creu, iniciando durante los cien primeros días de mandato, si es alcaldesa, las primeras acciones necesarias para hacerlo. «Ya lo he dicho varias veces: esta reforma no gusta a los vecinos, ha hecho bajar la caja de los comerciantes y presenta problemas de seguridad, de manera que, si soy alcaldesa, lo primero que haremos será remodelar la calle de la Creu para liberarlo del agobio al que lo ha condenado esta reforma sin sentido», ha dicho.
Paneque ha explicado que la reforma incluiría un replanteamiento del carril bici de la calle de la Creu, y que este no sería el único carril bici que se tendría que remodelar, ya que también se tiene que replantear el de la avenida Lluís Pericot, trasladando el vial para bicicletas al espacio central de las isletas. «Es necesario actuar con consenso con los vecinos. En Girona, estos años no ha habido ninguna reforma ambiciosa de urbanismo y es francamente decepcionante que en los dos casos la solución no ha gustado a mucha gente de Girona». La candidata a la alcaldía admite que tiene que haber «circuitos claramente separados entre peatones y bicicletas o patinetes». Así, «las islas de la avenida Lluís Pericot tienen suficiente espacio para presentar la posibilidad de que haya el carril bici y sea más seguro que el que hay ahora en un lateral de la carretera».
El modelo de movilidad en bicicleta y en vehículo eléctrico de Sílvia Paneque es que los llamados carril-bici tienen que estar en la calzada y no sobre la acera. De este modo, defiende que «el caso de la Avenida Lluís Pericot es la excepción que confirma la regla». La alcaldable entiende que Girona tiene que construir un circuito cerrado de carril-bici, que garantice la seguridad de todo el mundo y «sea especialmente protector con los peatones». Esto, según ha explicado, hace recomendable que los carriles-bici estén en la calzada, pero la excepción es Lluís Pericot, porque «las grandes islas en medio de las calzadas lo permiten».
