Roses ha finalizado el proyecto de adecuación de las murallas y el foso del entorno del Baluarte de Sant Andreu de la Ciutadella. La intervención ha permitido recuperar la continuidad y la visión de la geometría del recinto amurallado. En total, la actuación ha costado 583.000 euros y ha contado con una subvención del 1,5% Cultural del Ministerio de Fomento. El proyecto completa la intervención que se realizó en el año 2021 en la que se consolidó la estructura y se creó una pasarela superior para posibilitar las visitas públicas.
El proyecto de adecuación que acaba de finalizar ha actuado en los tramos de muralla que transcurren entre el Baluarte de Sant Jaume y la Porta a Terra de la Ciutadella, con 240 metros de longitud totales, así como en el Baluarte de Sant Andreu. La actuación supone la integración arquitectónica y paisajística de este importante espacio del conjunto monumental, con la recuperación de la volumetría original del baluarte gracias al levantamiento y restitución de los elementos destruidos a lo largo del tiempo y con el uso de los mismos criterios materiales y cromáticos que los empleados en restauraciones previas llevadas a cabo en el recinto.
Los trabajos han consistido en la adecuación del foso formando una suave pendiente que permitirá, en episodios de lluvias, el recorrido del agua del recinto existente, en la plantación de semillas para naturalizar el espacio, así como en el saneamiento de los lienzos de murallas que se extienden entre el baluarte de Sant Jaume y la Porta de Terra.
En cuanto al baluarte, en los últimos meses, se han restaurado grietas y fisuras existentes y se han restituido las plataformas, arcos, contrafuertes y alineaciones exteriores que habían sido destruidos. Para esta restitución se ha empleado material cerámico de las mismas características que el utilizado en la restauración del Baluarte de Sant Jaume, dando así coherencia y armonizando todo el conjunto.
