Los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre de 46 años que conducía drogado y de forma temeraria por la AP-7 en el Gironès. Los agentes lo vieron a las diez y media de la mañana del miércoles 25 de mayo, mientras estaban haciendo patrullaje preventivo en la autopista en el término de Vilademuls (Pla de l'Estany).
El hombre circulaba a 170 km/h haciendo zig-zag a gran velocidad y poniendo en peligro al resto de vehículos. Por eso hicieron un seguimiento durante 9 km para intentar detenerlo. Cuando lo interceptaron le encontraron varias cantidades de marihuana, hachís, pastillas de anfetaminas, éxtasis, cocaína y 24.000 euros en efectivo. El conductor también llevaba 370 dirhams, la moneda que utilizan en Marruecos.
La policía consiguió detener al hombre en la C-66, en el municipio de Sant Julià de Ramis (Gironès). Cuando lo iban a identificar, el conductor agredió levemente a los agentes. Los Mossos, sin embargo, vieron enseguida que se encontraba bajo los efectos de alguna sustancia y por eso le hicieron una prueba de detección de drogas. El hombre dio positivo en THC (cannabis).
En el primer registro del vehículo, los Mossos d'Esquadra encontraron muchas sustancias estupefacientes y por eso llamaron a la Unidad de Investigación de Girona para que se hiciera cargo de la actuación y se activó la Unidad Canina.
Finalmente los agentes encontraron 230 gramos de marihuana, 425 de hachís, 23 pastillas de anfetaminas, 1,4 kg de éxtasis, 270 gramos de cocaína y básculas de precisión. La policía también encontró 24.000 euros y 379 dirhams en efectivo.
Por todo esto, los agentes detuvieron al hombre por dos delitos contra la seguridad vial (uno por la conducción temeraria y el otro por conducir bajo los efectos del cannabis), otro contra la salud pública por tráfico de drogas y un último por atentar contra los agentes de la autoridad. El detenido ha pasado a disposición judicial este viernes.