-Ya hemos superado la primera parte de la legislatura, fuertemente marcada por la pandemia. ¿Cómo valora estos dos años al frente del gobierno de Arbúcies?
No puedo valorarlos del todo positivamente porque, poco antes de la pandemia, tuvimos el temporal Gloria y Arbúcies fue el municipio que más lo sufrió. Sufrimos unos perjuicios de 1.800.000 euros propios del Ayuntamiento. Para acabar de rematarlo, vino la Covid y, entre ambas cosas, nos hemos visto obligados a abandonar proyectos que estaban en marcha, como la nueva residencia de ancianos, y otros proyectos que estaban a punto de ser ejecutados posponerlos, como el cambio de todo el alumbrado público y el arreglo de algunas calles en el casco antiguo y en el Eixample, que debían hacerse nuevos. Por lo tanto, no podemos decir que ha ido bien porque, a nivel de Ayuntamiento, hemos tenido un perjuicio muy grande.
Por lo demás, muy bien porque, a nivel humano, hemos dado más valor a lo que tenemos, como nuestro entorno natural. Mucha gente ha redescubierto estas montañas nuestras que tenemos en el Montseny y en la zona de las Guilleries. Además, se ha descubierto la parte humana de las personas ayudándose unos a otros. Aquí hemos hecho varios proyectos tanto de apadrinar bombonas de butano por parte de familias para gente que no tenía, como de cestas de compra para gente que sufría ERTEs y no tenía dinero.
-¿Cómo está ahora Arbúcies después de la afectación del temporal Gloria?
Para solucionar las afectaciones del temporal, hicimos un planteamiento en tres partes: lo imprescindible, lo urgente y lo necesario. Lo imprescindible ya lo hicimos cuando nos quedamos tres días incomunicados, sin poder acceder a las poblaciones vecinas porque había muchas carreteras afectadas y caminos de bosque dañados. Después hicimos lo que era urgente, todo aquello que necesitábamos para funcionar como municipio, como la red de alcantarillado, por ejemplo. Ahora nos falta hacer lo necesario, cosas que no son vitales para la vida cotidiana del pueblo pero que sí son necesarias, como reconstruir algún aparcamiento que se derrumbó.
-La pandemia ha provocado una crisis económica importante. ¿Qué medidas se han planteado desde el Ayuntamiento de Arbúcies para reactivar la economía del municipio?
Arbúcies es el centro económico de nuestra zona del Montseny gerundés. Tenemos 8 grandes empresas con 4 polígonos industriales. Hay 4 empresas carroceras que tienen 25 o 30 empresas subsidiarias trabajando para ellas. Estas empresas no han producido autocares y esto ha provocado un efecto dominó y las empresas subcontratadas también han tenido que detener toda su actividad. Esto ha provocado muchos ERTEs que se han alargado en el tiempo, aún hay activos, aunque ahora ya se están empezando a levantar. Como Ayuntamiento, dentro de nuestras posibilidades, hemos hecho obra pública, no demasiado grande, para que el sector de la construcción pudiera seguir trabajando. Pero el temporal Gloria nos ha limitado la economía de tal manera que no hemos podido desarrollar todo lo que queríamos. También estamos ayudando a las empresas en el tema de subvenciones, hemos hecho reuniones con pymes, etc., pero, desgraciadamente, no hemos podido poner al alcance de la ciudadanía todos los recursos que hubiéramos querido por culpa de la afectación del Gloria en nuestra economía.
-¿Cuáles serán los proyectos prioritarios durante esta segunda parte del mandato?
Para empezar, hacer todo aquello que ya debíamos haber hecho, como terminar la nueva residencia de ancianos y hacer una serie de calles que hace 50 años que no se tocan. En esta segunda parte de legislatura queríamos hacer la Biblioteca, pero esto quedará para el próximo mandato. Tenemos el proyecto de cambiar todo el alumbrado público por una cuestión de eficiencia energética e instalar placas solares en los edificios públicos gracias a una subvención europea. Esto es lo que podremos hacer de aquí a final de mandato, no podremos hacer nada más, ya sea por tiempo ya sea por presupuesto. Del 1.800.000 euros que he comentado antes para arreglar los desperfectos del temporal Gloria, recuperaremos 650.000 de administraciones supramunicipales, pero el resto tendremos que ponerlo nosotros y esto nos condiciona muchísimo.
-Las escuelas de Arbúcies han estrenado este curso un nuevo modelo de comedor. ¿Qué mejoras presenta respecto del anterior modelo y cómo está funcionando?
La idea que teníamos desde el Ayuntamiento era una cocina de proximidad, producto de km 0, cocinado al momento, no queríamos producto congelado ni comida preparada. Por lo tanto, el nuevo modelo de comedor viene a ser esto. El hecho de que el nuevo modelo sea con cocina propia en las escuelas hace que se pueda hacer más de un menú, como menús para celíacos u otras intolerancias alimentarias. Este nuevo modelo también nos permite tener monitorización y toda una serie de actividades para las dos horas que hay entre clase y clase a la hora del comedor.
-El Ayuntamiento aprobó este verano las obras de ampliación del cementerio municipal. ¿Qué plazos tienen estas obras y cuáles son los trabajos que se deben hacer?
El cementerio municipal de Arbúcies está prácticamente sin nichos para poder poner a la venta. Con estas obras ampliamos todo el cementerio de arriba a abajo por todo un lateral y se construyen unas calles nuevas para poder ubicar unos 350 nichos más. Esto se debe hacer por fases. Cada vez que se termina una calle, se ponen los nichos a la venta y, cuando están prácticamente todos vendidos, se empieza otro. Ahora mismo estamos en la fase de adjudicación de la obra, que tenemos previsto que empiece en el mes de enero o febrero del año que viene para que pueda estar terminada hacia el verano.
-Han tenido muchos problemas con telefonía e Internet y han hecho frente común con otros municipios para pedir una solución. ¿Han obtenido alguna respuesta?
Nosotros tenemos una línea general, que funciona bien, y unos ramales interiores que pasan por cuatro municipios (Hostalric, Breda, Sant Hilari y Arbúcies) que son los que están en mal estado porque hay árboles caídos, hojas... De vez en cuando, se rompe un hilo, vienen los operarios, lo arreglan y se marchan. Lo que pedimos es que haga una actuación de saneamiento de toda la línea porque cuando se cae la línea, estamos muchas horas desconectados, la última vez estuvimos más de 30 horas sin Internet. Esto supuso un perjuicio para toda la ciudadanía, pero también para empresas, tiendas, restaurantes..., que no pudieron hacer funcionar los datáfonos. Esto ha traído un gran perjuicio a la zona.
Estamos cansados de presentar quejas por el procedimiento habitual y ahora hemos ido al consumidor e iremos al Síndic de Greuges y hemos pedido hora a la Conselleria de Industria para reclamar una solución para un problema que está afectando a más de 20.000 habitantes entre todas las poblaciones afectadas. Está claro que, sin un buen servicio de Internet y telefonía, la economía no funciona y, si no lo solucionamos, habrá gente que se marchará porque no puede trabajar con dignidad.
