Ya se puede considerar como una tradición que cada año por estas fechas, cuando falta una semana para que se celebre La Marató de TV3, en Blanes se acoja una actividad que habitualmente sólo se puede ver otros dos veces al año: por Semana Santa y por la Fiesta Mayor de Santa Anna. Se trata del pasacalle que protagonizan los dos grupos de armados de Blanes: los Manaies y los Manaies Iuniores.
Como es habitual, el desfile con aires marciales, acompañada de la música que interpreta la banda que integra las dos unidades, volvió a captar el interés de los vecinos y visitantes que paseaban por el núcleo histórico de la ciudad. Y es que cada vez que los integrantes de los dos grupos armados protagonizan una actividad siempre atrae la expectación y la admiración a partes iguales.
Pasacalle en apoyo de La Marató de TV3
Se trata de uno de los actos más vistosos que tiene lugar cada año en Blanes con motivo del programa televisivo solidario, no sólo por la indumentaria que llevan —fidedigna con la vestimenta, armas romanas y otros detalles que los caracterizan—, sino sobre todo por el acompañamiento musical. Los soldados romanos —pequeños y grandes— desfilaron por las calles del núcleo histórico de Blanes en un impresionante pasacalle que salió desde su lugar habitual, bajo el Arco de los Copatrons.
Lo encabezaban los dos capitanes de las dos unidades, Francesc Serra, padre e hijo, que durante este año comparten esta tarea en las respectivas filas de los Manaies de Blanes y los Manaies Iuniores. Periódicamente, la marcha se fue deteniendo para que tanto los Manaies Iuniores como los legionarios adultos acercaran la conocida y característica hucha de La Marató de TV3 al público, para que la fueran llenando con monedas y billetes.
Hay que decir que en general todo el mundo suele colaborar en la experiencia, tal y como volvió a ocurrir este pasado domingo, una semana antes de la celebración del programa televisivo. Entre el público que estuvo siguiendo el pasacalle se contaba el alcalde de Blanes, Jordi Hernández, así como otros concejales y concejalas del consistorio que tampoco se quisieron perder el evento.
Para darle aún más veracidad, en cada parada que se iba haciendo se leía una proclama pronunciada e interpretada al más puro estilo de los Bans Romanos, con reminiscencias latinas y declinaciones incluidas. En esta ocasión se estrenó en esta tarea Joel Ristol, quien explicó a todo el mundo por qué se estaba haciendo aquella actividad. El pasacalle también incluyó una parada estratégica ante la Roca de Sa Palomera, donde se hizo una fotografía de familia con todos los manaies, grandes y pequeños.