Un hombre de 66 años ha aparecido muerto después de participar en una especie de ritual sexual individual en Besalú, en la Garrotxa. Según ha adelantado 'El Punt Avui', la víctima estaba en su casa arrodillado, desnudo y atado con unas correas que envolvían su cuello y los genitales. De hecho, la causa de su muerte habría sido un ahogamiento. A su alrededor se encontraron también objetos sexuales.
El hijo de la víctima alertó a los servicios de emergencia porque no podía contactar con su padre. Un vigilante del Ayuntamiento de Besalú y un vecino fueron a la vivienda y encontraron el cuerpo del hombre, ya muerto. Los Mossos d'Esquadra y la comitiva judicial analizaron la escena y concluyeron que el hombre ya llevaba días muerto y que la muerte, probablemente, había sido accidental.
Según indican, el hombre participó en un acto masoquista individual que consistía en atarse y autoestranglarse para obtener satisfacción sexual, un acto que puede resultar muy peligroso porque, en caso de accidente, la víctima queda inmovilizada y ni siquiera puede pedir ayuda, como en este caso.