Más de 3.300 escolares de Blanes participan en la campaña '¡Por un Mar Sin Plástico!'

13 de mayo de 2021 a las 11:25h
El Ayuntamiento de Blanes ha puesto en marcha este mes de mayo una Campaña de Sensibilización para que los escolares de la ciudad tomen conciencia sobre una de las cuestiones más preocupantes de carácter medioambiental que existen hoy en día: la presencia de plásticos en el medio marino. Organizada por el Área de Residuos y Limpieza municipal, la propuesta ha sido muy bien aceptada por los centros educativos, de modo que todos ellos –públicos y concertados– se han adherido. A lo largo de este mes de mayo y hasta principios de junio, las educadoras medioambientales municipales irán a las diferentes escuelas –nueve en total– para compartir con los chicos y chicas una sesión práctica que tiene un doble objetivo. Hacerlos participar de forma activa en contribuir al reciclaje de plásticos depositándolos donde corresponde, y ayudar a concienciar a sus respectivas familias sobre la urgencia de contribuir activamente. Más de 3.300 escolares de Blanes participan en '¡Por un Mar Sin Plástico!' La campaña lleva por nombre '¡Por un Mar Sin Plástico!' y, previamente a las experiencias prácticas que se han comenzado a realizar, las educadoras medioambientales ya han realizado charlas previas en las aulas. Participan en total más de 3.300 chicos y chicas que abarcan una importante franja de edades: desde P3 hasta 6º de primaria, organizados cada uno de ellos y ellas en diferentes grupos burbuja en cumplimiento de las normas COVID. Tras las explicaciones teóricas previas, las sesiones prácticas en cada uno de los 9 centros escolares consisten en pedir a los chicos y chicas que en el día que se ha determinado para la visita traigan a la escuela al menos 10 envases. En esta acción participan los escolares de 1º a 6º de primaria, que grupo tras grupo acuden al patio de la escuela para ir vertiendo los envases en los contenedores que se han instalado ex profeso durante ese día. Los chicos y chicas protagonizan lo que después se espera que también hagan en sus respectivos hogares: verter los plásticos en el contenedor de Envases. A cambio, todos y todas reciben un 'Boc'N Roll' como obsequio. Es decir: un envoltorio para los bocadillos y/o la fruta que lleven a la escuela o cuando van de excursión, en sustitución del habitual papel de aluminio o la bolsa de plástico. Nuevamente, una forma más de tomar conciencia sobre la importancia de todos los detalles. Por su parte, los más jóvenes de la experiencia –los niños y niñas que van a las clases de P3, P4 y P5– también participan a su manera en esta acción de concienciación medioambiental. En su caso, las educadoras medioambientales les preparan murales con el dibujo de un animal de grandes dimensiones –un pez, un delfín, etc.–, que los niños deben rellenar y darle contenido a base de pegar tapones de colores separados cuando se tiran las botellas y envases al contenedor. 'Si no quieres llevarte plástico a la boca, tíralo donde corresponde' Las sesiones teóricas previas que se realizan en las aulas antes de las jornadas prácticas se centran en una charla apoyada con un power point encabezado por el nombre de la campaña y con un eslogan propio: 'Si no quieres llevarte plástico a la boca, tíralo donde corresponde'. De entrada, se explica a los chicos y chicas la importancia de tirar los residuos al contenedor adecuado para ese residuo, para evitar que vayan donde no corresponden. Apoyan las explicaciones con fotografías reales de los malos usos que se pueden encontrar en los contenedores: un colchón o el envase de cartón de una pizza tirados en un contenedor de orgánica; o bien comida caducada de un supermercado depositada en un contenedor de papel y cartón. Desgraciadamente, es el pan de cada día con el que se encuentran los operarios y operarias de la empresa de recogida de residuos, Nora, cuando vacían los contenedores. La siguiente fase de las clases teóricas es explicar y enseñarles con fotografías cómo acaban llegando los plásticos al mar, y las corrientes marinas que originan la formación de grandes islas de plástico. Después de ver otra elocuente serie de fotografías con animales luciendo todo tipo de desechos de plástico, se habla de los microplásticos y la cadena alimentaria que produce que, finalmente, lo que comen los peces, acabe en el estómago de los humanos. La sesión se cierra con una nueva serie de fotografías donde hay nuevos ejemplos de malos comportamientos humanos en lugares despoblados del municipio. Allí se tiran desde muebles hasta neumáticos, pasando por las sempiternas bolsas de basura, restos de material de construcción, y un largo etcétera. La última frase que cierra el power point lo dice todo: Queremos limpio nuestro entorno y poder disfrutarlo, una afirmación que invariablemente es compartida por los niños.
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C CIUTAT
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