La Garrotxa se blinda para evitar robos con la instalación de varias cámaras de videovigilancia en puntos estratégicos de la comarca. Se trata de aparatos conectados directamente con Mossos d'Esquadra, a quienes les salta una alerta si la cámara detecta una matrícula sospechosa. De esta manera, los agentes saben por qué zona se mueve y pueden actuar antes de que pase nada. Es la fórmula que ha encontrado el Consell Comarcal de la Garrotxa para hacer frente a una carencia "evidente" de policías y que se nota especialmente en 20 de los 21 municipios que la conforman y que no tienen Policía Local. La única localidad que sí cuenta con cuerpo propio es la capital, Olot, hecho que lleva a los alcaldes de pueblos pequeños a pedir más mossos en la comarca.
A partir del mes que viene los pueblos de la Garrotxa contarán con un dispositivo de seguridad que hace tiempo que esperaban. A pesar de que ha habido algunos retrasos con las licitaciones, por fin muchos alcaldes que pedían tener cámaras en las entradas de la comarca tendrán a disposición esta herramienta. El objetivo es poder actuar contra los robos, en una zona que es especialmente vulnerable porque se trata de una comarca con una extensión de terreno grande, con casas diseminadas y que tiene poca presencia policial.
De hecho, este es el principal reclamo que hacen tanto los alcaldes de los pueblos como el propio Consell Comarcal, más Mossos que patrullen. Y es que solo Olot tiene Policía Local propia, ya que el resto de pueblos que conforman la Garrotxa son demasiado pequeños como para contar con un cuerpo dedicado a la localidad.
El problema, sin embargo, es que muchas de estas localidades tienen masías o núcleos habitados muy diseminados, hecho que atrae a los ladrones. Todos los alcaldes reconocen el "muy buen trabajo que hacen los Mossos", pero dejan claro que "no dan abasto" para cubrir una extensión de terreno tan grande como la que representa la Garrotxa.
Puntos clave
Por todo ello, la solución que debe servir para facilitar el trabajo a los Mossos ha sido colocar cámaras en las entradas y salidas de la comarca. Unas están colocadas en la rotonda de entrada a Besalú, para cubrir los coches sospechosos que entran desde Girona o salen en esta dirección. Otra está colocada en la zona posterior de los túneles de Bracons y así se tiene constancia de los que operan viniendo o saliendo desde el Ripollès. Además, en la rotonda de la Canya también habrá si se desvían hacia aquella zona. En les Planes d'Hostoles hay justo en la entrada y, además, están coordinadas con las de Sant Gregori para aquellos ladrones que circulan por la C-63.
El alcalde de les Planes, Marc Puig, señala que esta época es cuando más actúan los ladrones, coincidiendo con el invierno y el cambio de hora que hace que pronto se haga oscuro. "Estamos preocupados y sabemos que los recursos son los que son, pero nuestra queja al Departamento de Interior es siempre la misma. Nos hacen falta más mossos", remarca.
Lluís Bosc es vecino de les Planes. Vive en una zona apartada con su mujer y explica que hace un tiempo le entraron a robar, mientras dormían. "Me di cuenta cuando me desperté de madrugada para ir al lavabo y vi que lo habían revuelto todo", lamenta. Explica que, desde entonces, no duerme "del todo tranquilo", pero confía en que las cámaras faciliten el trabajo a los Mossos y que disuada a los ladrones.
Vecinos implicados
Desde el Consell Comarcal de la Garrotxa explican que algunos pueblos fueron reticentes a poner cámaras inicialmente, pero que ahora sí que ya han mostrado su voluntad de instalarlas cuando se pueda. En este sentido, el presidente del Consell, Santi Reixach, explica que la iniciativa tiene un gran consenso entre los pueblos y los ciudadanos. "Se trata de evitar que roben en las casas. Nos hacen falta estas cámaras", ha remachado.
Reixach también ha explicado que la colaboración vecinal es "muy importante" para detectar posibles ladrones que entran o salen del pueblo. Y es que la actuación de varios vecinos de la Pinya, en la Vall d'en Bas, consiguieron frustrar el robo en una casa por parte de unos ladrones.
