Joan Casanovas dedicó su vida al arte; ejercía de diseñador, fue uno de los fundadores de la Asamblea Democrática de Artistas de Girona (ADAG), entre muchos otros ejercicios. La creación del eslogan de Girona marcó un antes y un después dentro de la ciudad; ya que, tanto los ciudadanos de Girona como los de fuera, empezaron a disfrutar de este eslogan tan pegadizo y fácil de aprender.
Un eslogan que enmarcó la ciudad de Girona como algo más que una ciudad; todo lleno de objetos se enmarcaron con estas palabras tan fuertes y contundentes. Toda Girona disfrutó de una nueva era gracias a la creación artística de Joan Casanovas.