Los Mossos d'Esquadra han puesto en marcha este domingo un dispositivo de control de motoristas a cien tramos con una alta afluencia de circulación de la red viaria catalana.
El objetivo del despliegue, en el que el cuerpo ha activado 90 efectivos en todo el territorio, es el de detectar comportamientos de riesgo y reducir la accidentalidad; sobre todo del colectivo de motocicletas y ciclomotores, que el año pasado se vieron implicados en un 48,5% de los accidentes mortales en Cataluña.
El jefe del Área Regional de Tráfico de Girona, Joan Costa, lo atribuye a que "es uno de los vehículos que más se utiliza últimamente". En los controles, han detenido a conductores que no portaban la documentación en regla, habían modificado ilegalmente el vehículo o avanzado en continua.