Diversas actividades del Archivo Comarcal de la Garrotxa por sus 40 años

11 de abril de 2023 a las 18:50h

El Archivo Comarcal de la Garrotxa celebra sus 40 años de historia con diversas actividades programadas para las próximas semanas. Entre las actividades destacan la exposición de estos 40 años del equipamiento y también una vitrina con documentación diversa recopilada durante estas cuatro décadas.

 

EXPOSICIÓN

  • 40 años del Archivo Comarcal de la Garrotxa
  • Del 14 de abril al 30 de junio, Sala de actos del Archivo Comarcal de la Garrotxa
 

El 31 de enero de 1983 el Ayuntamiento de Olot y el Departamento de Cultura de la Generalitat de Cataluña firmaron el convenio de creación del Archivo Histórico Comarcal de Olot. La sede oficial, en la planta baja del Hospicio, en el centro de Olot, se inauguró en septiembre de 1987. En octubre de 2005, en aplicación de la Ley 10/2001, de 13 de julio, de archivos y documentos, el archivo pasó a denominarse Archivo Comarcal de la Garrotxa (ACGAX).

 

En 2009, se firmó un convenio de colaboración entre el Departamento de Cultura y Medios de Comunicación de la Generalitat de Cataluña, el Consejo Comarcal de la Garrotxa y el Ayuntamiento de Olot para la cogestión del Archivo Comarcal de la Garrotxa. Este convenio implicó la creación de un archivo de nueva factura, en el puig del Roser, que se inauguró el 16 de marzo de 2012.

 

Ahora, con motivo de la celebración del 40 aniversario del nacimiento de la institución se ha organizado una exposición conmemorativa del nacimiento de la institución.

 

LA VITRINA DEL TRIMESTRE

  • 40 años del Archivo Comarcal de la Garrotxa / 1
  • Del 14 de abril al 30 de junio, Sala de consulta del Archivo Comarcal de la Garrotxa
 

A través de una muestra de la diversidad documental de los fondos y colecciones que custodia el Archivo Comarcal de la Garrotxa se conmemoran los 40 años de vida de este equipamiento cultural.

 

ITINERARIO PERSONAL

  • El Olot de David Santaeulària
  • Plaza del Puig del Roser, 15 de abril, 11 h
 

Mirar la ciudad a cierta altura y a ras de suelo con la voluntad de fijarse en elementos que están, pero no siempre vemos, de prestar atención en aquellos objetos que no echaremos de menos hasta que hayan desaparecido, de plantearse cosas que damos por sabidas y quizás no lo son tanto, de cuestionarse, incluso, si aquello que damos por normal o habitual no podría ser de otra manera.

David Santaeulària Serra (la Vall d’en Bas, 1970) nos propone un itinerario personal que es el compendio de una serie de observaciones y preguntas –algunas trascendentes, otras aparentemente anecdóticas– que en su conjunto revelan aspectos sustanciosos sobre nuestro entorno y, a menudo, nos pasan inadvertidos.