La Guardia Civil ha desmantelado un cultivo de marihuana con 5.350 plantas en una parcela anexa a un antiguo camping de Figueres y ha detenido a dos personas como responsables de la plantación.
Los arrestados habían aplanado la parcela para favorecer el cultivo y vivían en unos vestuarios que habían habilitado desde donde controlaban las plantas. El uso de drones fue determinante para descubrir el escondite de droga. La policía atribuye a los detenidos los delitos de cultivo y elaboración de drogas y un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente.