Cuatro coraleros que pescaban coral en el Port de la Selva (Alt Empordà) fueron denunciados el martes pasado en el marco de una actuación de control del litoral gerundense. La acción forma parte de una campaña para mejorar e incrementar el control de las zonas de pesca y la eficacia de las actuaciones de lucha contra la pesca ilegal de esta especie marina. En el programa participan la Dirección General de Pesca y Agentes Rurales del Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil.
Los agentes de los diferentes cuerpos vigilaron la zona durante dos semanas antes de actuar. Esta vigilancia ha permitido emitir siete denuncias y elaborar cinco informes de seguimiento complementarios. Hay infracciones por pesca de coral rojo en solitario (la norma exige que se haga en pareja y que los dos pescadores tengan licencia) y por pesca sin licencia con agravante de talla mínima. Alguno de los denunciados también había pescado coral rojo anteriormente y no lo había anotado en el libro de registro. La profundidad a la que se trabajaba oscila entre los 21 y los 35 metros. En el marco de la actuación se decomisaron tres equipos de inmersión completos y 2,316 kilos de coral rojo. El único coralero con licencia había pescado 630 gramos, y los otros dos 1,68 kilos. Aparte, se decomisó otro saco que estaba dentro de la embarcación con 1,29 kilos más. Desde el Departamento de Agricultura, Ganadería y Pesca se alerta de que en Cataluña, las poblaciones de coral rojo se encuentran en una situación "crítica" que llevó a la Administración pesquera autonómica a reducir a la mitad las licencias para esta campaña de pesca. Solo hay cinco coraleros autorizados y hay una moratoria de la pesca de 10 años, que se alargará hasta 2027. El Departamento cita un informe científico de principio de año para afirmar que el coral en buen estado de conservación es entre el 4 y el 10% del total.