Cataluña está viviendo este martes, 18 de julio, su día más caluroso de la historia, al menos teniendo en cuenta los datos de la Red de Estaciones Meteorológicas Automáticas (XEMA) de más de 30 años de datos del Meteocat. Hasta hoy, nunca se había superado de forma oficial en todo el territorio la temperatura de 43,8 °C, marcada por la estación de Alcarràs, en el Segrià, el 29 de junio de 2019.
Este martes, varias estaciones catalanas han superado esta temperatura. De hecho, la estación del Pantano de Darnius, en Boadella (Alt Empordà), y la de Navata (Pla de l'Estany) han alcanzado los 45,1 °C, que por ahora se convierte en el nuevo máximo histórico de calor en Cataluña.
Otras estaciones se han quedado muy cerca, con 44,8 °C en Anglès (la Selva), 44,4 °C en Artés (Bages), 44,2 °C en Banyoles (Pla de l'Estany) y 44,0 °C en Castellnou de Seana (Pla d'Urgell). En la Bisbal d'Empordà, con 43,8 °C, se ha igualado la temperatura de Alcarràs; mientras que en Òdena (l'Anoia), con 43,7 °C; y en Tàrrega (l'Urgell) y Santa Coloma de Farners (la Selva), con 43,6 °C, se han quedado a las puertas.
Aparte, y un hecho que indica la intensidad del calor registrado hoy en Cataluña, a las 15:00 h de la tarde un total de 70 estaciones meteorológicas habían superado ya los 40 °C.

Desde el Meteocat explican que uno de los elementos determinantes para alcanzar estas temperaturas tan elevadas en el noreste de Cataluña es el viento de garbí, es decir, de suroeste, que llega muy recalentado a la zona y evita que la marinada mantenga la temperatura a raya incluso en la línea de la costa.
Por ahora, el Servicio Meteorológico de Cataluña mantiene la alerta roja por calor extremo en todo el norte del territorio, y solo se salvan las comarcas costeras (excepto la Costa Brava), y el prelitoral sur y central. Afortunadamente, a partir de mañana las temperaturas bajarán y no se alcanzarán valores tan elevados.
