Las ciudades de Blanes y Terrassa son las dos únicas de toda Cataluña que participan desde este mes de enero en el proyecto RESIST: Regiones por la Resiliencia del Cambio Climático a través de la Ciencia y la Innovación.
Su objetivo es acelerar la transformación y aumentar la capacidad de adaptación al cambio climático de doce regiones europeas. Tanto la ciudad vallesana como la gerundense serán pioneras, de manera conjunta con las once zonas restantes.
La iniciativa es financiada por la Unión Europea con un presupuesto de 26,6 M€, y trata de probar soluciones de adaptación y gestión de las emergencias derivadas del cambio climático de los retos clave en Europa.
Más concretamente, en Cataluña se centra en temas como riadas, sequías, olas de calor e incendios. En este sentido, el proyecto RESIST quiere apoyar el desarrollo de estructuras de gobierno y la ampliación de enfoques participativos.

Este último aspecto se quiere lograr con la co-creación de métodos y prácticas, tanto en zonas rurales como en espacios urbanos, necesarios para garantizar el éxito en la transformación hacia una Europa que sea mucho más resiliente, más resistente y adaptable al cambio climático de aquí al año 2030. El proyecto cuenta con un plazo de 5 años, e incluye 56 socios comprometidos de la Unión Europea, Noruega y Ucrania.
Dará apoyo a 12 regiones de la Unión Europea en sus esfuerzos para construir resiliencia frente a los impactos del clima. Cataluña, el suroeste de Finlandia, el centro de Dinamarca y el centro de Portugal serán las regiones pioneras que pondrán a prueba soluciones de adaptación a los principales retos relacionados con el clima en su zona.

Cada una de estas cuatro regiones estará hermanada con otras dos (una de renta baja y otra de renta alta) con características biogeofísicas similares para poder trabajar de manera conjunta.
En el caso de Cataluña, se hará con Apulia (Italia) y Baixo Alentejo (Portugal). Por su parte, el suroeste de Finlandia trabajará con Normandía (Francia), Macedonia Oriental y Tracia (Grecia); el centro de Dinamarca con Blekinge (Suecia) y Zemgale (Letonia); y el centro de Portugal con Vesteralen (Noruega) y Extremadura (en el estado español).
Blanes incidirá especialmente en las zonas de afectación por inundaciones
En cuanto al Ayuntamiento de Blanes, le corresponden cerca de 264.000 € de subvención de la Unión Europea, con los que se trabajará para fortalecer la resiliencia a través del Departamento de Protección Civil. El objetivo que se ha marcado el consistorio blanense es hacer hincapié en aumentar la resiliencia en los casos de inundaciones, incidiendo en la prevención.
Geográficamente, Blanes es susceptible de sufrirlas a través de dos frentes diferentes: el río Tordera y la fachada marítima. El proyecto que se está poniendo en marcha a través del servicio municipal de emergencias es hacer frente común con las zonas con más posibilidad de ser afectadas por inundaciones.
El trabajo se centrará especialmente en establecer un sistema de avisos a la población en las zonas más vulnerables, así como en los espacios de uso público o comunes, como por ejemplo centros escolares, centros comerciales, etc.

Protección Civil, en coordinación con la Policía Local de Blanes, ya tuvo que implementar este trabajo específico hace apenas tres años, coincidiendo con el Temporal Gloria.
Durante el episodio más grave del fuerte temporal de mar, viento y lluvias, se tuvo que luchar precisamente para prevenir a la población ante los negativos efectos que pudiera tener, no tan sólo en cuanto a infraestructuras, sino sobre todo para salvaguardar las vidas de los ciudadanos y ciudadanas.