Atienden a 138 familias gerundenses que no podían pagar el alquiler o la hipoteca

06 de julio de 2017 a las 16:30h
La Generalitat atendió a 138 familias de las comarcas de Girona con problemas para pagar la hipoteca o el alquiler de su vivienda entre 2013 y 2017. La intermediación se hizo a través de las siete oficinas Ofideute, que el Gobierno tiene repartidas por toda la demarcación, y a las que a partir de este jueves, se le añaden tres más en Girona, Banyoles y Salt. La consejera de gobernación, Meritxell Borràs, ha destacado que en el 70% de los casos en toda Cataluña se ha conseguido renegociar la deuda y las familias no han perdido la casa. Borràs pide que las personas afectadas se pongan en contacto con la oficina "lo antes posible", ya que es más fácil encontrar una salida. "Hemos detectado que la respuesta es mucho más positiva si nos llegan los casos al inicio", ha remachado.
La intermediación de la Generalitat ha permitido que 138 familias gerundenses, que no podían pagar el alquiler o la hipoteca, hayan evitado perder la casa en 2016. Todo ello gracias a la negociación que desde las oficinas Ofideute se ha hecho entre los bancos y las personas afectadas. La consejera de Gobernación, Meritxell Borràs, ha destacado la necesidad de "seguir potenciando" este servicio. Por eso, este jueves han entrado en funcionamiento tres oficinas más en las comarcas de Girona, concretamente en Salt, Girona y Banyoles. Con estos tres ya son diez los puntos de atención que la Generalitat ha repartido por toda la demarcación. En el conjunto de Cataluña son 75 las oficinas en funcionamiento y 13.000 los casos atendidos desde 2011. Borràs ha explicado que los datos "demuestran que son un servicio imprescindible", ya que desde el Gobierno consideran "una prioridad" poder dar respuesta a los ciudadanos en temas de vivienda. Aparte de las oficinas de la Generalitat cada ayuntamiento tiene, en su caso, su propio servicio. De hecho, en Girona hay una oficina de vivienda que trabaja en paralelo a Ofideute y que también resuelve los problemas de aquellas personas que tienen dificultades para pagar las cuotas de sus casas. Borràs ha recordado que ponerse en contacto lo antes posible "es clave" para poder resolver el caso. "Aunque al principio puede haber una cierta vergüenza por parte de las familias, es necesario que nos pidan ayuda cuando han dejado de pagar una o dos cuotas", comenta la consejera. "Nos hemos encontrado casos de personas que ya tienen la orden de desahucio y el margen de actuación es mucho más estrecho", ha concretado. Tres nuevos abogados Las nuevas oficinas contarán con tres letrados pagados por la Diputación de Girona y que filtrarán los casos en función de sus necesidades. El vicepresidente de la Diputación de Girona, Fermí Santamaría, ha explicado que gracias a estos abogados "se podrá derivar a las personas afectadas hacia un lugar u otro". La intención es que cada caso vaya donde mejor se pueda tratar y resolver. Los abogados han sido elegidos por el Colegio de Abogados de Girona y también recibirán formación por parte del personal de Ofideute. Un convenio necesario para Salt La presentación de estas tres nuevas oficinas se ha hecho en el Ayuntamiento de Salt, un lugar con una casuística particular. De hecho, el consistorio recibe cada mes una media entre 200 y 250 casos de personas que tienen una notificación por parte del banco, ya sea de desahucio o advertencias por haber dejado de pagar algún recibo. El alcalde de la ciudad, Jordi Viñas, asegura que para Salt la firma de este convenio "es una gran noticia", ya que la problemática de la vivienda es "prioritaria" para el ayuntamiento. Viñas ha explicado que "hay que seguir trabajando" para asegurar que todos los ciudadanos reciben una solución a sus problemas.