La sección tercera de la Audiencia de Girona ha condenado a 5 años de prisión a un hombre por intentar matar a otro de una puñalada en medio de una calle de Figueres. Los hechos se produjeron la madrugada del 18 de febrero de 2023 cuando el condenado se encontró a la víctima y a otro joven. Tras una conversación, se sacó el arma de unos ocho centímetros de hoja del pantalón, mientras los amenazaba de muerte. Fue entonces cuando la víctima le propinó un empujón para defenderse y el agresor le clavó una puñalada en el abdomen que la dejó malherida. A raíz de la agresión, la víctima necesitó ser operada para salvarle la vida. El acusado ha reconocido los hechos y ha quedado condenado tras un pacto entre la fiscalía y la defensa.
El escrito de acusación de la fiscal señala que el condenado, la víctima y el otro joven que iba con ella se conocían de antes. El ministerio público señala que se encontraron sobre la una de la madrugada del 18 de febrero en la calle Forn Baix, situada en el centro de la capital alt-empordanesa. Tras una breve conversación, el acusado amenazó de muerte a la víctima y le propinó una puñalada en el abdomen, después de que esta se hubiera intentado defender con un empujón.
La agresión dejó malherida a la víctima que sangró de manera abundante y necesitó una intervención quirúrgica para evitar morir. A raíz de esto, la víctima tuvo que estar ingresada cuatro días en el hospital y en total necesitó un mes para recuperarse plenamente de las heridas.
En la vista que se ha celebrado este martes, el acusado ha reconocido los hechos y ha aceptado la pena de 5 años de prisión y la indemnización de 2.280 euros a la víctima. Inicialmente, la fiscalía solicitaba 9 años de pena, pero ha acabado llegando a un pacto con la defensa para rebajarla a 5, a cambio del reconocimiento de los hechos por parte del ya condenado.
Además, la pena incluye también una medida de libertad vigilada de ocho años una vez el acusado haya cumplido la pena de prisión. Además, el hombre no podrá acercarse a la víctima que ahora mismo se encuentra fuera del país y no ha acudido al juicio
En su escrito, el ministerio público reconoce que el procesado es consumidor habitual de drogas, si bien no presentaba ninguna alteración de sus capacidades cognitivas ni intelectuales.
Una vez reconocidos los hechos, el tribunal ha firmado la sentencia que es firme y no se puede recurrir. Hay que tener en cuenta que el acusado lleva 1 año y 10 meses en prisión provisional, un tiempo que se le restará de la pena a la que se le ha condenado.
