Los Mossos d’Esquadra han podido identificar a la “mujer del cobertizo” que apareció muerta en Sant Julià de Ramis en el año 2018 y que hasta ahora no sabían quién era. Hace unos meses, la Policía catalana compartió su imagen dentro de una acción del programa ‘Identify Me’ de la Interpol que pretende identificar a personas que han aparecido muertas y sin ningún tipo de identificación.
Según ha avanzado la periodista Anna Punsí, la víctima era una joven que provenía del Paraguay y a quien ha podido identificar gracias a las huellas dactilares. La chica fue enterrada en una fosa común del cementerio de Girona ante la imposibilidad de identificarla.
Se acaba así con una incógnita que los Mossos arrastraban desde hacía casi siete años, ya que su cuerpo fue localizado el 4 de agosto de 2018, colgado en un gallinero en Sant Julià de Ramis. Se desconocen, de momento, más datos sobre su muerte. Una de las hipótesis que se investigaban era la del suicidio, aunque no se ha confirmado esta versión.
La víctima, pues, es una mujer de entre 25 y 35 años, que medía 1,61 m de altura, tenía la piel blanca, los ojos castaños claros, el cabello rubio y un tatuaje en el delantero izquierdo con la palabra ‘éxito’ escrita en hebreo.