La multinacional Nestlé invertirá 15 millones de euros (MEUR) en la fábrica de Girona para construir dos nuevas líneas de envases reciclables para el café soluble.
La primera se centrará en sobres individuales de Nescafé, permitirá reducir 60 toneladas de plástico anuales y tendrá capacidad para hacer hasta 1.200 por minuto. La segunda línea, que entrará en servicio a finales de año, hará envases para rellenar los botes de Nescafé.
Es la primera que se pone en marcha en todo el Estado de este nuevo formato, que la multinacional lanzó al mercado hace un par de años. Fabricará envases para diferentes gamas de café soluble, de los 75 a los 275 gramos. “Las nuevas líneas permitirán utilizar materiales reciclables y reducir el uso de plásticos vírgenes”, subraya el director de la planta, Arnau Pi.
Las obras de las dos líneas de producción en la fábrica que Nestlé tiene en el polígono de Domeny ya han comenzado. Desde aquí, la multinacional produce café soluble, bajo la marca Nescafé, y también en cápsulas Dolce Gusto.
Según informa la multinacional, las dos nuevas líneas automatizadas permitirán utilizar material reciclable, minimizar el uso de plástico virgen y ser más eficientes energéticamente.
Una de las líneas producirá bolsas de café soluble de diferentes formatos, de entre 75 y 275 gramos. Permiten consumir Nescafé directamente de la bolsa o bien rellenar los botes de vidrio que se encuentran en los lineales de los supermercados. La compañía sacó este producto -las bolsas ‘refill‘- hace ahora un par de años. Y cuando se arranque la nueva línea de producción, la fábrica de Girona será la primera de todo el estado español que las producirá.
Según subraya Nestlé, esta bolsa tiene “como mínimo un 97% menos de peso” que los botes de vidrio de Nescafé, lo que ayuda a reducir la huella ambiental. Se prevé que la nueva línea de producción, que servirá tanto para el Nescafé Classic como para el Nescafé Descafeinado, se arranque a finales de año.
1.200 SOBRES POR MINUTO
Por otro lado, Nestlé también está construyendo una segunda línea que se focalizará en los sobres individuales de Nescafé y permitirá hacerlos con material reciclable. Permitirá reducir hasta 60 toneladas de plástico virgen al año y, una vez se arranque, producirá 1.200 sobres por minuto, tanto de café natural como descafeinado, que se venderán en los canales de restauración, hostelería, supermercados y pequeño comercio.
El director de la fábrica Nestlé en Girona, Arnau Pi, subraya que la inversión de 15 millones de euros en la planta “refuerza nuestro compromiso con la sostenibilidad, al tiempo que se centra en ofrecer productos de alta calidad a los consumidores”. “Las nuevas líneas de envasado nos permitirán utilizar envases reciclables, lo que supone un paso significativo a la hora de reducir plástico virgen y fomentar la economía circular”, añade.
La fábrica de Nestlé de Girona se inauguró en 1968, y en 2009 se amplió con una nueva planta (que produce cápsulas Dolce Gusto). Actualmente trabajan más de 900 personas. La fábrica exporta el 75% de la producción de cápsulas y el 84% de la de café soluble a más de 56 países de todo el mundo.
Durante los últimos cinco años, y dentro de la apuesta de la multinacional para la sostenibilidad, la fábrica ha reducido en un 40% las emisiones de CO₂ equivalentes por tonelada de producto y casi un 22% el consumo total de energía.
La planta, que ya cuenta con una caldera de biomasa que utiliza el poso del café para obtener vapor, también está construyendo una segunda caldera. Entrará en funcionamiento este mismo 2025 y permitirá revalorizar las más de 52.000 toneladas de poso de café que la fábrica genera anualmente.