El juzgado de Figueres ha ordenado la autopsia de una niña de tres años que murió el martes por la noche en el hospital de Figueres, después de que sus padres hayan presentado una denuncia por posible mala praxis.
La familia llevó a la menor al CAP de Roses dos días antes de su muerte, ya que sufría mal de pandilla, pero tras la visita médica se la envió a casa.
El martes, ante el empeoramiento de su estado, la llevaron de nuevo al centro, y se decidió su traslado al Hospital de Figueres.
Una vez en Figueres, se solicitó una ambulancia para derivar a la niña al Hospital Trueta de Girona, pero la menor murió poco después de llegar al Hospital de Figueres, antes de que el traslado pudiera hacerse efectivo.
Los padres por ello, han solicitado una autopsia para aclarar las circunstancias de la muerte, que ya ha sido aceptada por el juzgado de primera instancia e instrucción número 8 de Figueres.
Actualmente, el caso está en proceso de investigación.