Los vecinos y las vecinas del edificio de dos plantas de la calle Bruc, 41, de Santa Coloma de Gramenet desalojados la noche del sábado, pudieron regresar ayer por la tarde a sus viviendas una vez finalizada la reparación de los daños causados en el inmueble por las lluvias de los últimos días.
Los bomberos, acompañados por el arquitecto municipal de guardia, decretaron el sábado el desalojo preventivo de toda la finca a causa de las filtraciones de agua en dos de los áticos que afectaron a diversas partes del edificio.
A media mañana de ayer lunes, un arquitecto contratado por la comunidad de propietarios y propietarias realizó una revisión de la finca, acompañado por dos arquitectos municipales para certificar los daños originados por las lluvias intensas y continuadas de los últimos días. El informe del arquitecto señalaba las reparaciones urgentes a realizar para que los vecinos y vecinas volvieran a sus viviendas sin ningún tipo de riesgo.
“En el Ayuntamiento hemos hecho un seguimiento desde el sábado por la noche, con todos los protocolos establecidos para estas situaciones de emergencia con precinto del edificio. Hemos tenido constancia de que ya se han hecho los primeros trabajos de reparación, y desde la propiedad nos han confirmado que la estructura del edificio es sólida y está en buenas condiciones. Una vez hemos recibido la certificación de esto, el vecindario ha podido volver a sus hogares”, ha asegurado la alcaldesa de la ciudad, Mireia González.
Cobertura social a las personas afectadas
El Ayuntamiento ha acompañado y asesorado a la comunidad afectada durante la incidencia, y una vez se enteró el sábado por la noche, los servicios municipales atendieron al vecindario en un equipamiento cercano y les ofrecieron una solución habitacional de emergencia a la que se acogieron una treintena de personas.
La alcaldesa, Mireia González, hizo en persona el seguimiento de la atención a las familias durante las 48 horas en que tuvieron que permanecer fuera de su domicilio.
A primera hora de la mañana de ayer, los servicios sociales del Ayuntamiento se volvieron a reunir con las personas y familias afectadas para dar respuesta a sus demandas y necesidades, y asegurarles una solución habitacional temporal hasta el retorno a sus hogares, que finalmente no ha sido necesario aplicar.