Los Mossos d'Esquadra detuvieron los días 21 y 22 de julio a ocho personas de entre 17 y 28 años por la 'rave' en el metro de Barcelona de finales de enero con grafitis y daños en las instalaciones por valor de 54.000 euros. Aparte, la policía catalana ha identificado a tres personas más y no descartan otras detenciones. La bautizada como 'Subway Party' se celebró el fin de semana del 25 y 26 de enero, contó con la participación de unas 170 personas y obligó a detener el servicio en las líneas L1 y L2. El evento ilegal se centró en realizar actos vandálicos, principalmente pintadas en convoyes, carteles e instalaciones de TMB, pero también se lanzó un extintor a las vías.
Para llevar a cabo las pintadas, se accionaban los frenos de emergencia de los vagones para detener los convoyes, un hecho que provocó la alteración del servicio de la red ferroviaria. Además, los congregados en la 'Subway Party' ocuparon masivamente los espacios públicos del metro, donde consumieron sustancias estupefacientes y generaron molestias por el uso elevado de música con altavoces de gran potencia. Los agentes de la Unidad de Investigación del Área de Transporte Urbano (ARTU) consiguieron identificar a los autores de las pintadas gracias a la colaboración de TMB, Renfe y FGC, y de las cámaras de videovigilancia repartidas por la red ferroviaria.
Más allá de este incidente, los Mossos han conseguido relacionar a los detenidos con 17 hechos delictivos más de características similares entre noviembre de 2024 y junio de 2025. En estas actuaciones, los detenidos también utilizaban el freno de emergencia para detener los convoyes y la circulación. Los ocho arrestados, que tienen una gran movilidad tanto en el estado español como a escala europea, acumulan 49 antecedentes policiales y pasaron a disposición judicial el 22 de julio con los cargos de varios delitos de daños y desórdenes públicos.