Que las Rodalies catalanas son un desastre, que no hay día que no generen noticias negativas y que sus usuarios las tienen que abandonar si no quieren sufrir retrasos y dolores de cabeza, no sería noticia. Es nuestro pan de cada día.
Nos llega un vídeo colgado en la red X por el usuario Ramon Pavia, denunciando la situación esperpéntica y de riesgo que vivieron los pasajeros de un convoy que circulaba por la R1 en el Maresme.
Poco antes de llegar a la estación de Llavaneres, el tren se detuvo, parece que por un atropello, y, como es habitual, la compañía no dio ninguna explicación. Después de una hora larga de espera, los pasajeros se hartaron y decidieron llevar a cabo 'un plan de evacuación' por su cuenta.
Así abrieron las puertas del convoy, a través de un cañaveral subieron por el talud de la vía y se dirigieron a la estación de Llavaneres a través de la carretera N-II, una vía rápida con mucho tráfico, con el riesgo que todo esto conlleva.
Pavia se queja de que en ningún momento apareció ningún representante de la compañía para asistir e informar a los pasajeros. Un ejemplo más de la ineptitud de nuestros gestores y de la dejadez de funciones de Renfe.