Los Mossos desmantelaron el 14 de octubre un grupo dedicado a los robos con fuerza con uso de marcadores en el interior de domicilios en Barcelona. Estaba formado por tres hombres de entre 40 y 43 años y acumulaba doce antecedentes por la misma modalidad delictiva.
A raíz de una identificación ordinaria por parte del Grupo de Delincuencia Urbana de la comisaría de Sants-Montjuïc y de la detención de varios integrantes del grupo que contaban con una alta actividad delictiva, la Unidad Territorial de Investigación de Multireincidentes inició una investigación.
Los investigadores observaron el 14 de octubre, durante unas vigilancias, a los tres hombres juntos con una mochila que provenía de un robo anterior y los detuvieron.
El mismo día, el juzgado de guardia de Barcelona concedió una autorización judicial para realizar las entradas y registros en dos domicilios de Barcelona y Badalona, donde los agentes intervinieron material para efectuar los robos, como ganzúas y herramientas para fabricarlas, bombines para abrir puertas y ropa de disfraz para ocultar parcialmente el rostro. También localizaron 10.000 euros en efectivo y joyas.
Los integrantes del grupo accedían al interior de los edificios, colocaban marcadores de cola en la parte inferior de las puertas de los domicilios y hacían tareas de control de la zona. Días más tarde, volvían a acceder a los edificios para verificar los pisos marcados y salían del lugar con paso acelerado, y acababan abandonando la zona con su vehículo. Actuaban aprovechando el período estival de vacaciones, y lo hacían especialmente por la noche.
Los agentes encontraron indicios que relacionan a los detenidos con 13 robos con fuerza en el interior de domicilios en Barcelona durante agosto y septiembre. Cuatro de estos hechos ocurrieron en el distrito de Sant Martí, cuatro en el de les Corts y cinco en el de l'Eixample.
Los tres detenidos pasaron a disposición judicial al juzgado de instrucción en funciones de guardia el 16 de octubre.