Los hechos se produjeron en la calle de los enamorados de Santa Coloma de Gramenet. Todo empezó en el año 2008, pero no sería hasta cinco años después, en 2014, cuando la infidelidad de Carlos S. con Remedios P. sería destapada.
Hacía 40 años que los dos vivían puerta con puerta e, incluso tenían las llaves del piso del otro, según ha explicado Jesús García del diario El País. En el año 2008 y según él por un breve lapso de tiempo, se convirtieron en amantes.
Fue entonces cuando ella le exigió 5.000 euros para poder abortar después de la primera aventura. Carlos S. pagó religiosamente sin saber que aquella primera transacción en mano, acabaría desembocando en un chantaje sistemático. Actualmente Carlos S. tiene 83 años mientras que Remedios P. tiene 66.
Más tarde ella le empezó a exigir pagos a través de transferencias a cambio de no revelar a la mujer de él el secreto que les unía, y el hombre decidió pagar para no decepcionar a la esposa que según su relato estaba mal de salud, ni a sus hijos. En 2013 la mujer le exigió 18.000. Aunque Carlos S. había trabajado como banquero durante toda su vida, para poder hacer efectivo el pago, tuvo que sacar dinero que tenía invertido en bolsa para pagar.
Al año siguiente la suma se situó en los 10.000 euros y fue entonces cuando el hombre pidió dinero a sus hijos con el falso pretexto de una operación de dientes. Los hijos sospecharon al instante y, después de presionarlo, acabó confesando la infidelidad y llevó a Remedios P., que ya no vivía en el inmueble de la calle de los Enamorados de Santa Coloma, ante un juez.
Ha sido así que finalmente la justicia ha dictaminado recientemente que ella cometió chantaje y que deberá pagar 28.000 euros y pasar tres años en prisión. Remedios P. niega los hechos y señala que él la acosó sexualmente.
