El Ayuntamiento valora positivamente el desalojo, esta misma mañana, de la casa ocupada de la calle Plana de l’Hospital. Esta ocupación generaba problemas de convivencia en la ciudad y acumulaba varias detenciones policiales de algunos de sus inquilinos como presuntos autores de delitos de robo con violencia, amenazas, coacciones y violación de domicilio.
Josep Maria Vallès, alcalde de Sant Cugat: “celebramos el desahucio de este inmueble, que provocaba graves problemas de convivencia y angustia entre el vecindario y comerciantes de la zona. Resolver esta situación era una cuestión prioritaria y hemos trabajado en ello desde un primer momento con la propiedad y los cuerpos de seguridad”.
La orden de desahucio ha sido tramitada desde el Juzgado de Instrucción núm. 1 de Rubí a partir de la denuncia presentada el pasado mes de noviembre por la Fundación Josep Carreras, propietaria del local.
El desahucio ha transcurrido sin incidentes y se han identificado a cuatro personas, que serán denunciadas por ocupación. La propiedad del local se está encargando de tapiar los accesos para evitar cualquier tipo de nueva ocupación.
Actuaciones coordinadas para facilitar el desalojo
El Ayuntamiento se ha implicado desde el primer momento para encontrar una solución a la ocupación del inmueble. De hecho, el 21 de junio, tres días después de la toma de posesión, el alcalde Josep Maria Vallès se reunió con el vecindario y los comerciantes de la zona afectada, representantes de la Fundación Josep Carreras, y con los jefes de la Policía Local y Mossos d’Esquadra para abordar esta situación.
Todas las partes implicadas acordaron, por unanimidad, hacer llegar al Juzgado de Instrucción núm. 1 de Rubí toda la información disponible para acelerar la orden de desahucio. Así, el día 24 de julio se aportó la siguiente documentación:
- La denuncia de la propiedad (Fundación Josep Carreras) presentada en noviembre de 2022
- Todas las denuncias y quejas del vecindario (con 190 firmas)
- Todos los atestados emitidos por los cuerpos de seguridad
El objetivo era conseguir que el Juzgado dispusiera de todos los argumentos necesarios para tramitar la orden con la máxima celeridad posible.
Por otro lado, se decidió que Policía Local y Mossos d’Esquadra hicieran una vigilancia permanente por el perímetro de la zona, que les permitiera hacer una actuación inmediata en caso de necesidad. Así, se sucedieron varias detenciones el día 17 de agosto (1 persona), el 18 de agosto (3 personas) y el 30 de agosto (3 personas).
