Sabadell contará con un nuevo Museo para explicar su historia y que, al mismo tiempo, dedicará especial atención y rendirá homenaje al textil, dando así respuesta a una reivindicación de muchos años de la ciudad. El nuevo equipamiento, que se ubicará en el edificio donde estaba el Museo del Gas, será un equipamiento actual e innovador, que llegue a todo el mundo, genere conocimiento y dinamice la economía. Un museo arraigado al territorio y a la comunidad, que permitirá reabrir un inmueble cerrado hace años, revitalizar su entorno y que debe consolidarse como elemento de singularidad y capitalidad para Sabadell.
Con estos objetivos, el Ayuntamiento y Naturgy han cerrado las negociaciones para que la ciudad recupere el edificio donde se ubicará el nuevo Museo. Paralelamente, el Grupo Impulsor, que cuenta con entidades como el Gremio de Fabricantes, la ESDI, la Fundación Antoni de Montpalau, la Fundación Bosch i Cardellach y teóricos del textil, ya ha empezado a trabajar en el proyecto museístico para concretar cómo será el museo y definir las actuaciones que habrá que llevar a cabo en el actual inmueble.
Tal como ha explicado la alcaldesa de Sabadell, Marta Farrés, con el futuro museo “daremos respuesta a una demanda histórica de la ciudad”. Y ha añadido que “es una oportunidad para dinamizar el entorno, ganamos un equipamiento en el Centro dando respuesta a la demanda de espacios y ganamos capitalidad”. También ha remarcado que “no estamos solos a la hora de hacerlo posible. Este no es proyecto de gobierno sino de ciudad y un proyecto de ciudad se hace colaborando”.
Un equipamiento de ciudad
El nuevo Museo debería permitir explicar la historia de la ciudad, a partir de tres 3 ámbitos: Historia preindustrial, Época industrial y La moda y confección. En este sentido, sería la sede central donde se dé a conocer la historia, pero a la vez se complementaría con otros elementos patrimoniales repartidos en el territorio, como pueden ser las chimeneas o los vapores, actuando como aglutinador, dándoles un sentido global y contribuyendo a avanzar en la museización del conjunto de la ciudad. Asimismo, el nuevo Museo resolvería los déficits de las instalaciones de la actual sede del Museo de Historia, en la calle de Sant Antoni, tanto a nivel de espacios, como de funcionalidad y posibilidades de exponer y difundir su fondo en condiciones idóneas.
Además de garantizar su vinculación al territorio, su dinamismo y que sea capaz de conectar y llegar a todos los públicos y, por tanto, de generar actividad social y económica, el nuevo Museo debería también promover la investigación y generar sinergias con universidades e institutos, constituyéndose como elemento clave para avanzar en conocimiento y promoviendo el liderazgo de Sabadell y su conexión y proyección al mundo.
El camino para hacerlo realidad
Ahora, una vez cerradas las negociaciones con Naturgy, seguirán todos los trámites administrativos para concretar la adquisición y el Grupo Impulsor continuará trabajando en el proyecto museístico, que podría estar listo a finales de 2024. La voluntad es que las obras de adecuación se pudieran iniciar en 2025.
Con todo, Sabadell recupera un espacio actualmente cerrado y ganará un nuevo elemento de capitalidad, poniendo en valor la historia de la ciudad.
El edificio
El edificio donde se ubicaba el antiguo Museo del Gas es una obra de estilo modernista del arquitecto Juli Batllevell, inaugurado en 1899 y que se incluye en el Plan Especial de Protección del Patrimonio de Sabadell. Tuvo una primera ampliación a cargo de Dani Freixes. Inicialmente, fue destinado a la fábrica de gas La Energía, posteriormente absorbida por Gas de Sabadell y finalmente por Catalana de Gas y Electricidad.
Desde 2011 hasta 2018 el edificio, una vez restaurado, fue destinado a Museo del Gas. El inmueble actual está construido para que sea altamente sostenible a nivel energético a través de placas fotovoltaicas, recogida de aguas pluviales y aislamiento térmico específico. Cuenta con 3.427 m2, de los cuales 2.773 m2 de superficie útil.