Polémica por la campaña de comunicación 'Barcelona Ciutat Llibre' impulsada por el Ayuntamiento de Barcelona. El Instituto de Cultura de Barcelona (ICUB) adjudicó a la empresa After Share SL – propiedad de Risto Mejide- la estrategia de comunicación de la iniciativa municipal para el fomento de la lectura por un importe de 110.000 euros. La campaña propone, entre otras medidas, enviar libros escogidos por libreros y bibliotecarios de la ciudad al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, bajo la premisa de que "nadie más que él necesita abrir su mente". El documento presentado por la empresa ganadora del concurso contiene faltas de ortografía. Fuentes del ICUB han señalado a la ACN que se trata sólo de una "propuesta de trabajo" que aún no es definitiva. Por su parte, Llegir en Català y el Grupo Municipal Demócrata ya han pedido su retirada.
Además de enviar libros de autores catalanes e internacionales al presidente americano y hacer un vídeo documental para difundir la acción, la empresa After Share SL también propone recoger las 'libertades' que aporta la lectura en la calle a través del arte urbano y convertir la exposición pública, posteriormente, en los elementos de comunicación de la campaña en opis, banderolas y banners. La iniciativa, bajo el concepto 'Barcelona Ciutat Llibre', es una de las medidas impulsadas por el consistorio después de que la UNESCO reconociera la capital catalana como Ciudad de la literatura. Fuentes del ICUB han precisado a la ACN que sólo se trata de una "propuesta de trabajo" –no la campaña- que aún no es definitiva. Llegir en català pide replantear la medida La Asociación de Editoriales Independientes Llegir en Català ha exigido a través de un comunicado la retirada de la campaña y el replanteamiento de la medida. Así, consideran que se trata de una campaña institucional y no de una acción para fomentar la lectura y tilda de "intolerable" el hecho de que el documento contenga errores ortográficos y esté "mal escrito". En esta línea, reclaman con "urgencia" una acción coordinada entre instituciones y agentes del sector que "abandone" las políticas de escaparate y esté dispuesta a trabajar a medio y largo plazo. "Nuestra voluntad es que haya más libros en las casas, en los centros educativos y en las bibliotecas, no en la Casa Blanca", recogen en el comunicado. Finalmente, han manifestado su preocupación por los anuncios "reiterados" de acciones y gastos del ICUB que creen que no responden a la realidad del sector y que no han contado con "ninguna interlocución previa". El Grupo Municipal Demócrata cree que "frivoliza" Por su parte, el concejal del Grupo Demócrata en el Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Ciurana, cree que la campaña hace un "flaco favor" a la defensa del valor de la lectura y a todos los agentes del sector hacen un "esfuerzo diario" para defender el valor de la literatura. Para Ciurana, la campaña de fomento de la lectura del Ayuntamiento de Barcelona "frivoliza" la causa y, por ello, presentará en la próxima Comisión de Derechos Sociales, Cultura y Deportes un ruego para pedir su retirada. "Pedimos que se haga otra consensuada con el sector para que el valor de la lectura llegue a todos los ciudadanos", ha precisado.
