El Parque Natural del Montseny recuerda un verano más que está prohibido bañarse en pozas y ríos de la zona para proteger el hábitat de ribera donde viven especies de alto valor como los tritones del Montseny (Calotriton arnoldi), el único anfibio endémico de Cataluña y en peligro de extinción.
La entrada al agua de personas y mascotas pone en riesgo su supervivencia, dado que son especialmente sensibles a hongos, virus y otros patógenos que se transmiten a través del agua y que les pueden llegar a causar la muerte. Las esporas de patógenos pueden ser transportadas por la ropa húmeda, barro en los zapatos, salabardos, e incluso las manos después de contactar con individuos infectados.
La entrada al agua o el simple contacto con las manos mojadas, tanto de personas como de mascotas, puede favorecer la transmisión de enfermedades infecciosas, como la quitridiomicosis o la infección por ranavirus, siendo una grave amenaza para el tritón y otros anfibios.
Estas acciones también alteran la calidad del agua, incrementando su turbidez y la materia orgánica, además de provocar la erosión del suelo. Todo ello tiene un impacto directo sobre la flora y la fauna local, según informan desde el parque.
El 41% de las especies de anfibios del mundo están amenazadas y en los últimos años se ha registrado una disminución notable de las poblaciones (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, 2020). Por esta razón, desde el Parque Natural del Montseny se recomienda a los visitantes evitar el contacto con el agua y controlar que los animales de compañía tampoco entren.
El tráfico ilegal de especies exóticas, que acaban liberadas en riachuelos y pozas, es otro factor de riesgo para el tritón del Montseny y el resto de población autóctona de anfibios. Está totalmente desaconsejado dejar ir animales foráneos, que pueden ser transmisores de enfermedades.