El AMB ha puesto en marcha, con la colaboración de cinco ayuntamientos metropolitanos (Viladecans, el Prat de Llobregat, el Papiol, Sant Feliu de Llobregat y Sant Cugat del Vallès), un servicio de asesoramiento a la ciudadanía y pymes en el proceso de instalación de placas solares, así como en la creación de nuevas comunidades energéticas. Este nuevo servicio, llamado La Teulada, ofrece ayuda a la hora de calcular los costes derivados de una instalación fotovoltaica (teniendo en cuenta las subvenciones existentes, bonificaciones del IBI, opciones de financiación y modelos alternativos, como el renting o la contratación a través de una comercializadora). La voluntad es que sea un sistema de ventanilla única (one-stop).
El servicio también facilita información sobre herramientas para llegar a acuerdos entre vecinos (modificación del Código civil, guías existentes), y ofrece información y recursos en forma de charlas a las comunidades, una guía de recomendaciones y otros instrumentos.
Asesoramiento personalizado
El proceso de asesoramiento y guía ofrecido por el AMB con el servicio La Teulada funciona de la siguiente manera:
- Atención presencial bajo demanda. Mediante cita previa, se establece una sesión de unos 30 minutos, en uno de los espacios habilitados en los diferentes municipios (oficinas locales de transición energética, oficinas de vivienda, etc.).
- Resultado del asesoramiento. Entrega de un informe de potencial fotovoltaico y cálculo de amortización.
- Derivación a FEGiCAT-Gremi, para la obtención de presupuestos de diferentes empresas especializadas.
- Entrega de un documento tipo lista de comprobación (checklist), como herramienta de evaluación de los presupuestos recibidos.
- Seguimiento de los asesoramientos, junto con FEGiCAT.
- Durante todo el proceso, asesoramiento a distancia mediante WhatsApp, correo electrónico y teléfono. La transición energética en la metrópolisHoy en día, el territorio metropolitano tiene una potencia fotovoltaica instalada de 25.215 kW, en un total de 2.965 instalaciones. Esta potencia instalada representa un total del 18 % de la potencia instalada en toda Cataluña en 2021, a pesar de representar un 42 % de su población. El crecimiento, sin embargo, no está siendo homogéneo. El reparto de instalaciones solares en el AMB es muy desigual: 10 municipios concentran la gran mayoría de placas, mientras que hay 10 que casi no tienen. En el contexto del Plan clima y energía 2030, el Programa marco de actuaciones en energía y clima (PMEC) es el programa del AMB que promueve actuaciones vinculadas a la transición energética, con especial énfasis en dos líneas de acción prioritarias para el período 2020-2023:
- Ayuntamientos 100 % renovables 2030, una estrategia que pretende alcanzar la neutralidad climática en edificios y el alumbrado público de los ayuntamientos metropolitanos mediante la instalación de 100 MWp de energía solar fotovoltaica, y reducir el consumo en un 50 %.
- Impulso de comunidades energéticas locales, una iniciativa para fomentar que la ciudadanía y las pymes metropolitanas inviertan en instalaciones solares fotovoltaicas en los tejados de viviendas y naves industriales, poniendo un especial énfasis en hacerlo de manera colectiva y compartida con su entorno inmediato.
Ayuntamientos 100 % renovables 2030
Actualmente, los ayuntamientos integrantes del AMB consumen unos 300 GWh anuales. Para alcanzar los objetivos descritos, el AMB está invirtiendo, entre 2019 y 2023, 26 millones de euros y 22MWp en energía solar fotovoltaica de alto consumo en 215 actuaciones, de las cuales 142 son en cubiertas de edificios de los 3.000 que hay en el área metropolitana de Barcelona (20 en polideportivos, 82 en escuelas y 40 en otros tipos de edificaciones). Así, el AMB se convierte en la Administración local líder en inversión solar en el Estado. Una parte muy importante de estos recursos destinados a la instalación de placas solares fotovoltaicas proviene de los fondos del Plan de sostenibilidad ambiental del AMB.
Este proyecto también se enmarca en el Convenio FEDER que la Generalitat de Cataluña y el AMB firmaron en 2017 para la gestión de proyectos metropolitanos dentro del programa operativo de inversión en crecimiento y empleo FEDER Cataluña 2014-2020 para ámbitos como las smart cities, la movilidad sostenible, la eficiencia energética o la recuperación y el fomento del patrimonio natural, industrial y cultural.
Hábitos energéticos en el territorio metropolitano
Para conocer las necesidades de la ciudadanía, antes de poner en marcha el servicio La Teulada, el AMB ha realizado una encuesta, por medio del Instituto de Estudios Regionales y Metropolitanos de Barcelona, sobre el uso que la población hace de la energía. Las principales conclusiones son las siguientes:
- Aunque el 80 % de las viviendas disponen de gas natural, solo el 53 % lo utiliza para calentar la casa.
- Entre un 18 % y un 23 % no puede mantener la casa a una temperatura adecuada.
- El valor medio de las facturas mensuales de electricidad es de 70 €/hogar.
- Aproximadamente el 60 % de la población ve probable o muy probable instalar placas solares en su tejado.
- Los principales impedimentos recogidos son: los costes (65 %), ponerse de acuerdo con los vecinos (60 %) y la falta de información (55 %).
- Entre el 62 % y el 72 % muestra gran predisposición a compartir energía con los vecinos.
- El 70 % desconoce la existencia de ayudas y subvenciones.
- Los hogares sin personas mayores de 65 años y con niños son los más proclives a instalar placas solares.
Por todos estos motivos, el servicio La Teulada será una herramienta eficiente para facilitar el acceso a la energía fotovoltaica.
Con el cambio a esta energía limpia, la ciudadanía reduce las emisiones de CO2: 1 kWp de energía solar fotovoltaica es capaz de producir 1.350 kWh anuales, equivalente a dejar de emitir 337,5 kg de CO2 cada año.
El ahorro económico también es notorio: puede fluctuar entre el 30 % y el 80 % del consumo energético del hogar o empresa.
Además, la entrada de los consumidores en el sistema eléctrico y su transformación en “prosumidores” permitirá una democratización del sistema eléctrico y una reducción global de los precios, la estabilización de la red y la reducción del consumo en determinadas horas punta, de manera que también se evitarán desigualdades sociales.
