Los vigilantes de seguridad del aeropuerto de El Prat encargados de los filtros de acceso comenzarán una huelga indefinida el próximo 4 de agosto para reclamar mejoras en sus condiciones de trabajo. Los paros se harán todos los viernes, domingos y lunes de 5:30 a 6:30, de 10:30 a 11:30, de 16:30 a 17:30 y de 18:30 a 19:30. Los trabajadores denuncian que por falta de personal están sometidos a una carga de trabajo insostenible que les genera agotamiento físico y psíquico. Además, alertan de que Eulen, la empresa concesionaria, para ahorrarse un plus de 1,17 euros la hora, no ofrece formación en radioscopia a los nuevos trabajadores, hecho que imposibilita que muchos no puedan rotar a los escáneres, generando más cansancio a los trabajadores que se encargan. Un conjunto de factores, añaden, que ponen en peligro tanto la seguridad de los viajeros como la agilidad a la hora de pasar los filtros.
Los representantes de los trabajadores aseguran que la situación que viven es insostenible, lo que se traduce en el hecho de que en el último año se han producido 30 excedencias, más de 35 bajas voluntarias, una treintena de bajas médicas por estrés o similares y un malestar generalizado en la plantilla. En cuanto a la huelga, temen que en la reunión de mediación se les impongan unos servicios mínimos suficientes para cubrir el 100% de los servicios actuales, lo que les impediría hacer visibles sus reivindicaciones y presionar a la empresa para conseguir las mejoras reclamadas.