La madrugada del domingo al lunes, trabajadores de la prisión de Brians 1 detectaron la presència irregular de un dron alrededor del centro penitenciario. A raíz de esto, se revisaron las instalaciones y se encontró un paquete donde había un dispositivo móvil y algunas placas de hachís. Fuentes penitenciarias explican que los hechos tuvieron lugar en el módulo 1, donde se localizó un teléfono móvil y dos tabletas de hachís de 100 gramos cada una aproximadamente. El dron no se pudo interceptar. Las mismas fuentes explican que se hizo seguimiento de los movimientos del dron mediante las cámaras de interior del centro y posteriormente se localizó la carga.
Según fuentes sindicales, en los últimos días es "muy habitual" la detección visual de estos aparatos. Son vuelos que en muchas ocasiones aparentan ser un rastreo del centro y en otros se sospecha de la intención de introducción de droga u otros objetos como teléfonos móviles.
El Departamento de Justícia está llevando a cabo las investigaciones necesarias para esclarecer los hechos, ha explicado a la ACN. Precisamente, el departamento está trabajando desde hace tiempo en la implantación de sistemas de detección de drones en todo el sistema penitenciario catalán. Concretamente, en Brians 1 y Brians 2 comenzará a funcionar un sistema de detección la semana que viene.
