La Policía Nacional ha liberado a una veintena de trabajadores que vivían en condiciones de "semiesclavitud" en seis locales de comida rápida ubicados en Mollet del Vallès, Martorelles, Parets del Vallès, Mataró y Torelló.
Según ha indicado el cuerpo policial, las víctimas no recibían ningún tipo de "contraprestación" por su trabajo, trabajaban todos los días de la semana y más horas del máximo legal permitido.
Además, muchas de ellas vivían en los mismos locales donde trabajaban, en condiciones higiénicas "nulas, sin ventilación y rodeados de material peligroso". Cuatro de las víctimas no tenían su situación regularizada en el país.
El operativo se desarrolló a finales del mes de marzo, después de que la Policía tuviera constancia de que los propietarios y gerentes de los locales "se aprovechaban de la necesidad y vulnerabilidad" de sus trabajadores, ya que algunos no tenían documentación legal en el país y tampoco estaban dados de alta en la Seguridad Social.
Agentes de la Policía detuvieron a cuatro personas, entre ellas el propietario y "máximo responsable" de todos los locales y tres encargados de los diferentes locales. Todos ellos, sin embargo, han quedado en libertad tras pasar a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Mollet del Vallès.