El Ayuntamiento de Barcelona trabaja con la hipótesis de que la palmera que mató a una chica cayó por estrés hídrico derivado de la sequía.
Según ha explicado este miércoles el jefe de gestión de el arbolado de Parques y Jardines, Joan Guitart, es la hipótesis principal hoy por hoy, a la espera de las conclusiones finales del informe encargado y el análisis de la palmera fracturada.

Por eso, como medida a corto plazo se ha optado por regar todas las palmeras datileras de características similares a la caída. Desde que se fracturó la palmera de la plaza de Emili Vendrell el jueves pasado, los técnicos de Parques y Jardines ya han revisado un centenar de palmeras datileras, de las cuales se han cortado preventivamente ocho.
Se han cortado porque presentaban un estrechamiento del tronco similar a la caída. Inicialmente, el consistorio dijo que se revisarían 800, pero ahora la cifra se eleva hasta 900.
