La Guardia Urbana ha inaugurado la nueva sede del Servicio de Atención a la Víctima (SAV) de Ciutat Vella, un equipamiento destinado a atender de forma exclusiva a las víctimas de violencia machista. Se trata del segundo SAV de la ciudad, después de que el pasado mes de marzo se inaugurara el servicio en Nou Barris. "No existe ningún servicio como este, es pionero e innovador porque pone en el centro a la mujer", ha asegurado el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, en una visita por las nuevas instalaciones. Asimismo, el alcalde ha recordado que durante 2023 se han producido 9 feminicidios, 2 en la ciudad de Barcelona. "La violencia machista sigue golpeando nuestras conciencias y requiere el esfuerzo de los servicios públicos", ha reivindicado.
El nuevo SAV, situado en la antigua comisaría de la Unidad Territorial de Ciutat Vella, dispone de un espacio de más de 100 m², desde el cual las víctimas pueden interponer denuncias, ser atendidas por juristas especializados o recibir atención psicológica. El objetivo, según Collboni, no "es la denuncia", sino hacer "un tratamiento integral de acogida en un espacio amable para la mujer y para los hijos que están a su cargo". "Queremos que la víctima sepa qué recursos tiene para defender sus derechos", ha añadido el alcalde.
Por eso, los espacios han sido adaptados con medidas para reducir el estrés y la angustia emocional y facilitar las declaraciones de las víctimas. Según Gemma Alfonso, subinspectora y responsable del servicio, las intervenciones en estos casos "son muy complejas", ya que la mayoría de las mujeres "minimizan las agresiones sufridas y no se reconocen como víctimas". "Vienen con un discurso disperso, incoherente y cuesta que estén tranquilas", ha explicado Alfonso.
Coordinación entre servicios
Collboni ha asegurado que la violencia machista se debe combatir "con todos los instrumentos": judiciales, policiales y asistenciales. Por este motivo, el alcalde ha valorado la coordinación entre los diferentes servicios y también la tarea de los movimientos sociales, que son "los que han trabajado para que esto fuera posible". "El servicio es una consecuencia de las luchas feministas", ha resaltado.
En esta línea, el alcalde ha avanzado que el consistorio seguirá trabajando para paliar otras desigualdades y delitos de odio, y ha puesto el foco en las discriminaciones racistas y LGTB-fóbicas. "Hay que hablar sobre los protocolos específicos en casos de delito de odio, ya que somos víctimas de la emergencia de ciertas ideologías que lo promueven y que no van a menos", ha lamentado el alcalde.Formación específica en violencia machista
Por otro lado, Collboni ha asegurado que los 23 agentes que trabajan en los dos SAV han recibido una formación específica en violencia machista para atender a las víctimas de una manera más "sensible y eficiente". El alcalde ha dicho que se trata de un servicio "voluntario", en el cual los agentes se han formado por el "compromiso" en la violencia machista. Desde el pasado 1 de marzo, en estos servicios se han realizado un conjunto de 900 intervenciones y 158 de las cuales han terminado en denuncias.A su vez, el teniente de alcaldía de Seguridad, Albert Batlle, ha dicho que el SAV "ha roto muchas barreras y muros mentales respecto a la intervención de los policías en estos casos". "Ahora tenemos una Guardia Urbana con formación para velar por estos temas y con herramientas para detectar los elementos de violencia machista", ha destacado.
