La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha premiado a Vilawatt como el mejor proyecto nacional de transición energética de 2022. La novena edición de los Premios a las Buenas Prácticas por el clima, entregados el viernes 23 de septiembre en la ciudad de Málaga, ha reconocido la apuesta del Ayuntamiento de Viladecans por impulsar el paso a un nuevo modelo energético. El alcalde Carles Ruiz recogió el galardón el pasado viernes 23 de septiembre.
Vilawatt ha conseguido el premio a la Transición Energética Local, una de las siete categorías con las que cuentan estos premios, que reconocen la acción local relacionada con la transición energética y la adaptación al cambio climático, y en esta nueva edición se habían presentado 73 actuaciones de 45 entidades locales.
El proyecto local Vilawatt se ha convertido en una herramienta pública pionera para luchar contra el cambio climático, promoviendo la energía 100% verde y una nueva cultura energética para lograr el empoderamiento ciudadano. Las intervenciones que están impulsando el ahorro de consumos, la comercialización de energía renovable, la rehabilitación energética de viviendas, la generación energética solar en edificios para el autoconsumo, la implantación de una moneda local vinculada a la sostenibilidad social, ambiental y económica, que ha permitido impulsar bonos de consumo local.
Gracias al Vilawatt, el municipio de Viladecans está haciendo su propio camino hacia la transición ecológica con el objetivo de continuar con el presente y el futuro mucho más habitable y sostenible. Desde que esta propuesta, impulsada por el Ayuntamiento, fuera una de las tres ciudades elegidas por la Unión Europea en 2016, a través de la primera convocatoria de ayudas Urban Innovate Actions (UIA), junto con París (Francia) y Gotemburgo (Suecia), para abordar los retos de la transición energética, ya se ha convertido en un proyecto pionero que ha comenzado a exportarse a otras ciudades europeas, posicionando a Viladecans como un referente de proyectos de transición ecológica. La Unión Europea valoró que "el proyecto fuera innovador y experimental para introducir soluciones para mejorar la eficiencia y reducir la dependencia de las energías fósiles, así como la implicación activa de la ciudadanía en la iniciativa".
