La comisión de seguimiento surgida a raíz de la crisis en los controles de pasaporte en el aeropuerto Barcelona-El Prat se volverá a reunir este viernes, según ha anunciado el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, en el Parlamento. La primera reunión tuvo lugar el pasado jueves y contó con representantes de la Generalitat, de los ayuntamientos de Barcelona y de El Prat, de la Cámara de Comercio, de Aena y del gobierno español. Después de los primeros compromisos, Rull ha dicho que el pasado domingo –día más crítico en el control de pasaportes- era la "prueba de fuego" y ha constatado que parece que "se ha pasado". Ha dicho que las cosas funcionaron "razonablemente bien" pero ha alertado al Estado de que seguirán "encima".
Rull ha dicho que esta segunda reunión será "más técnica" y servirá para monitorizar los datos de cómo están funcionando los controles. A la espera de acabar de "acreditar" estos datos, Rull ha explicado que el pasado domingo la media de tiempo de espera en la salida de los controles fue de 20 minutos y unos 30 de entrada. El consejero ha dicho que ahora lo importante es "consolidar" estos datos y evitar que las largas colas de espera se vuelvan a repetir. "No puede volver a haber un incidente de estas características, nos jugamos demasiado", ha declarado. El consejero ha reiterado que el Gobierno quiere tener una gestión "individualizada" del Aeropuerto de El Prat para poder tomar sus propias decisiones. Ha asegurado que la raíz de los problemas es la concepción que tiene el Estado de los aeropuertos, considerando el de Madrid como el principal exclusivamente.
