La Guardia Urbana de L'Hospitalet se planta para denunciar la "dejadez crónica" del cuerpo por parte del gobierno

La Guardia Urbana de L'Hospitalet se planta para denunciar la "dejadez crónica" del cuerpo por parte del gobierno

08 de septiembre de 2025 a las 19:08h

La Guardia Urbana de L'Hospitalet de Llobregat ha trabajado bajo mínimos este fin de semana, con una tercera parte de los agentes operativos mientras el resto estaban indispuestos. El gobierno ha aprobado un decreto para forzar la incorporación de agentes para cubrir las ausencias, pero la mayoría no ha acudido a la llamada y hay oposición general a hacer horas extra. Con esta plantada, quieren denunciar una "dejadez crónica" del gobierno respecto a las condiciones laborales del cuerpo, en plena negociación por una mejora salarial. En la última propuesta, el gobierno ofrece incrementar el sueldo 55 euros mensuales y un plus anual de 3.500 euros si no faltan más de 19 días al trabajo. Los sindicatos lo ven "insultante" mientras el ejecutivo dice que es una buena propuesta.

Los sindicatos SPL-CME, UGT y SPC aseguran que hace nueve años que intentan conseguir un nuevo convenio laboral y lamentan que, mientras tanto, la Guardia Urbana de L'Hospitalet está "paralizada" en una ciudad "donde la delincuencia no para de subir". "Triplicamos y cuadruplicamos el número de hechos delictivos de ciudades como Terrassa o Sabadell, pero cobramos hasta 6.000 euros anuales menos", aseguran.

En el marco de la revisión de los sueldos, el Ayuntamiento encargó un informe a la Diputación de Barcelona para valorar la situación de L'Hospitalet en comparación con las policías locales de ciudades de más de 50.000 habitantes. El estudio evidenció que el cuerpo cobraba una media de 2.000 euros anuales menos y el gobierno ha situado las negociaciones a partir de estos datos.

La semana pasada planteó una última propuesta a los sindicatos, planteando un incremento de 4.500 euros anuales divididos en dos conceptos: un plus fijo mensual de 55 euros y un plus anual de 3.500 euros condicionado a no superar el 10% de absentismo durante el año.

Cuando esta oferta llegó a la plantilla, pero, la mayoría de agentes la rechazaron. "Los 55 euros son claramente insuficientes y condicionar el plus anual al absentismo es una propuesta envenenada", se ha quejado este lunes el portavoz de SPL-CME, Juanjo Toran.

En una atención a la prensa, ha asegurado que el nuevo complemento de 55 euros va a costa de una redistribución de complementos que ya existen para algunos miembros de la plantilla y ha criticado que computen como absentismo los permisos laborales por motivos familiares, las horas para ir al médico o una semana de gripe. "Será imposible cobrar los 3.500 euros", ha insistido.

Los sindicatos reclaman una nueva propuesta "justa, sensata y digna". Aseguran que en los últimos diez años el sueldo de la plantilla ha subido una media del 18%, equivalente a unos 6.000 euros, "cuando el IPC se ha incrementado un 27%". Como mínimo reclaman que se equiparen los salarios al aumento del coste de la vida de la última década.

En medio de esta negociación estancada, el último fin de semana ha habido operativa una plantilla de mínimos, con sólo una patrulla en la calle cuando otros fines de semana hay al menos seis. Los agentes que no han ido a trabajar han manifestado indisposición -tienen un permiso para estas situaciones- o bien han presentado la baja laboral.

Este lunes el número de agentes indispuestos se ha reducido y la situación en el primer turno ha sido de "normalidad", según el gobierno. Ante la situación del fin de semana, pero, y teniendo en cuenta que es la Fiesta Mayor de Bellvitge, el ejecutivo ha aprobado un decreto para activar agentes que tenían fiesta y para ofrecer horas extraordinarias voluntarias. La respuesta, sin embargo, ha sido muy baja.

A preguntas de los periodistas, Toran niega que se trate de una huelga encubierta, "pero bajo cada uniforme hay personas que tienen familia". "Y cuando hace años y años que reclamas cobrar lo que te corresponde por el peligro que asumes, al final pides un reconocimiento", ha añadido. Respecto al decreto del gobierno, los sindicatos lo consideran una medida "desproporcionada" y han presentado una denuncia en los juzgados para pedir su suspensión cautelar.

El gobierno, abierto a negociar si hay "normalidad" en el servicio

A su vez, desde el gobierno municipal han lamentado la situación en que se encuentra la negociación y el elevado absentismo de este fin de semana. "Ha sido una pandemia que ha afectado de manera repentina a bastantes agentes", ha afirmado el teniente de alcalde de Seguridad, Jesús Husillos, que ha dicho que analizarán "rigurosamente" la situación de cada trabajador.

Husillos cree que ha habido una respuesta "desproporcionada" por parte de la plantilla y se ha mostrado sorprendido por el rechazo a la última propuesta de mejora salarial, "ya que los representantes de los sindicatos habían manifestado que era una buena oferta". El teniente de alcalde ha defendido que se trata de una "buena propuesta" y cree que ha habido un "desencaje" entre las expectativas mostradas por los sindicatos y la realidad que manifestó la plantilla.

"Hay margen para explicarlo mejor", ha añadido, defendiendo que "el Ayuntamiento se plantea movilizar muchos recursos económicos para incrementar la masa salarial un 10% de media". A pesar de reafirmar esta última oferta, se ha mostrado abierto a negociar algunos cambios con los sindicatos bajo una condición: "Cuanto más normalidad tengamos en la prestación del servicio, más fácil será encontrar estas posibilidades de encuentro y entendimiento", ha advertido.

A la espera de si el próximo fin de semana se repitiera el absentismo de los últimos días, el gobierno ha recalcado que la seguridad en la ciudad "está garantizada" con la Guardia Urbana y refuerzos de los Mossos d'Esquadra.

La dimisión y un pleno extraordinario

A su vez, los concejales de la oposición han criticado la situación en que se encuentra la relación con el cuerpo policial. Los portavoces se han reunido este lunes con Husillos y seguidamente con representantes de los trabajadores. El jefe de la oposición y líder local de ERC, Jaume Graells, cree que la falta de agentes en plenas fiestas de Bellvitge "es la gota que ha colmado la paciencia de la ciudadanía" y ha pedido que Husillos abandone las responsabilidades sobre la Guardia Urbana para que las asuma directamente el alcalde, David Quirós.

"La segunda ciudad más importante de Cataluña no se puede permitir lo que ha pasado este fin de semana", ha criticado Graells, que cree que el rechazo de los agentes a la propuesta de mejora salarial denota la "absoluta incapacidad" de Husillos para gestionar la policía.

A su vez, el grupo municipal del PP ha pedido la convocatoria de un pleno extraordinario para afrontar el futuro del cuerpo policial.