El Grupo Formació i Treball ha dado empleo a 448 personas en situación de vulnerabilidad durante 2019. De estas, más del 61% se han incorporado al mercado laboral una vez han finalizado su contrato en Formació i Treball, principalmente en los sectores de logística, hostelería y limpieza. Uno de los principales obstáculos a la hora de iniciar el proceso de búsqueda de empleo es el estado de salud. Un 26% de las personas que finalizan el itinerario de inserción no busca empleo por estos motivos, hecho que se traduce en un aumento de la cronificación en la vulnerabilidad de los colectivos que atiende.
Formació i Treball se mantiene un año más como la empresa de inserción más grande en cuanto a la creación de puestos de inserción de todo el territorio español, a la vez que también destaca por generar unos ingresos superiores a 20M€ en 2019 -un 33% más que el año anterior-; consolidando así el crecimiento de 2 dígitos desde hace seis años.
A través de sus Empresas de Inserción la entidad realiza itinerarios sociolaborales para personas en riesgo de exclusión social. El objetivo es empoderar a estas personas, formarlas en competencias transversales y específicas, y ofrecerles la experiencia laboral necesaria para su posterior colocación en empresas ordinarias o en proyectos de autoempleo. Este tipo de empresa, con un marcado carácter social, se focaliza en conseguir un equilibrio social, beneficioso para el conjunto de la sociedad, y que cobra especial relevancia en tiempos de crisis como la actual. De aquí la necesidad de crecer ahora en contratos reservados para las Empresas de Inserción, al ser una de las herramientas de inclusión social más potentes que tenemos en nuestra sociedad. Contratos liderados desde la Administración Pública, como marca la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público, que reservan un porcentaje de estos contratos a las empresas de inserción y centros especiales de trabajo.
En cuanto a la formación, se capacitó a 958 personas durante 2019, un 15% más que en 2018. Un 37% de ellas realizaron prácticas en empresas y un 41% de personas se incorporaron al mercado laboral, manteniendo así la tasa de inserción respecto a 2018. Hostelería y restauración, industria alimentaria y comercio y marketing son los sectores con más acciones formativas.
La suma de programas de acción social desarrollados por Formació i Treball ha dado como resultado la inserción en el mercado laboral de 1.180 personas durante 2019, un 14,5% más que el año anterior. Estas personas han sido contratadas por empresas externas a través de proyectos como el Incorpora de la Obra Social "la Caixa" o propios como el Impulsa't, en colaboración con el programa Làbora del Ayuntamiento de Barcelona, la Fundación Agbar y la Diputación de Barcelona. Desde sus orígenes la entidad ha atendido a más de 34.000 personas; y en concreto en 2019, a 4.487 personas, un 57% de las cuales han sido mujeres.
Proyectos de Economía Circular
La entidad trabaja activamente a partir de modelos de economía circular, de alto impacto social, con visión medioambiental y sostenibilidad económica. Es decir, modelos generadores de triple impacto a partir de iniciativas que ayudan a resolver una necesidad social no cubierta, reducen la generación de residuos y crean o consolidan puestos de trabajo sostenibles en el tiempo para personas en riesgo de exclusión social. Las líneas estratégicas de Formació i Treball se basan en esta realidad, y son posible gracias a un equipo formado mayoritariamente por trabajadores y trabajadoras de inserción . Destacan la línea textil y la línea alimentaria, que durante 2019 han dado empleo a más de 200 personas en situación de vulnerabilidad.
El proyecto textil de la entidad forma parte de la iniciativa estatal Moda Re-, impulsada por Cáritas, y está vinculada a la cadena de establecimientos Botiga Amiga. El objetivo es la promoción de la economía social y solidaria a través de la reutilización, el reciclaje y la venta de ropa usada, con la finalidad principal de generar ocupación social y sostenible. Ahora es más necesario que nunca trabajar por la concienciación de la reutilización de la ropa. En la actualidad Formació i Treball tiene presencia en 210 municipios, a través de más de 1.080 contenedores vinculados a Cáritas y Roba Amiga. Una de las metas prioritarias en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, es el consumo y la producción responsable. En este sentido, las plantas de tratamiento de ropa y complementos del Grupo han conseguido ahorrar 23.111 toneladas de emisiones de CO2 durante 2019.
En cuanto a D'ins, el proyecto alimentario, destaca por una propuesta de valor orientada a la transformación social y al respeto por el entorno. En línea con la agenda 2030 se trabaja en un modelo sostenible y con un firme compromiso para promover el consumo responsable. El objetivo de D'ins es formar y dar experiencia en un contexto de trabajo real, empoderar a las personas y prepararlas para un trabajo. Al proyecto le da vida el alumnado, las personas que hacen itinerarios de inserción, el profesorado y la coordinación productiva. Un equipo vivo y siempre preparado para acoger a todo el mundo que quiera disfrutar de su cocina. Durante 2019 se han inaugurado nuevos espacios: el Bar-Restaurante en la Residencia Xior de la UPC del Campus Diagonal Besòs, el Bar-Restaurante en el Centro Cívico St. Ildefons en Cornellà de Llobregat y el Bar-Restaurante en la UPC del Campus Terrassa.
Apuesta por la dignificación en la entrega social
En la Fundación también damos apoyo a personas en situación de vulnerabilidad para cubrir necesidades básicas. Lo hacemos a través de programas de entrega social, la gestión de los cuales se lleva a cabo en espacios alejados del asistencialismo (tiendas y restaurantes); hecho que a la vez, permite generar puestos de trabajo dirigidos en exclusiva a colectivos vulnerables.
En Botiga Amiga atendemos a personas derivadas por los servicios sociales para que puedan adquirir la ropa que necesitan en un espacio normalizado donde acceden personas que compran ropa de segunda mano por convicción y aquellas que lo hacen por necesidad. En la tienda del Fòrum se hace la entrega social de mobiliario, donde las personas derivadas de los servicios municipales de los ayuntamientos de Barcelona y del área metropolitana, pueden adquirir los muebles según su gusto y preferencias. Una apuesta por la dignidad en la entrega social. Durante 2019 se han realizado cerca de 7.500 entregas de ropa, muebles, juguetes y puericultura. En cuanto a las entregas alimentarias se han entregado más de 70.000 menús.
Más trabajo en red
Durante 2019 hemos dado un paso adelante en la diversificación de alianzas. Las relaciones con empresas, entidades e instituciones públicas permiten una mejor adaptación a los cambios constantes del contexto social. Esta interrelación aporta un valor añadido a nuestra atención como es el acceso a nuevas áreas de conocimiento (el ámbito tecnológico o la sociedad de la información) y la inserción en sectores económicos emergentes.
En la contratación laboral ha sido esencial el trabajo del área de intermediación sin olvidar el papel de las empresas, su apuesta por las personas significa incluirlas en el proyecto colectivo que es la sociedad. Durante 2019, 1.180 personas han sido incorporadas al mercado laboral a través de 1.690 contratos.
Un futuro marcado por la COVID19
La crisis sociosanitaria ha golpeado duramente a los colectivos más vulnerables que atendemos. Incluso personas que no habían necesitado nunca ayuda se han encontrado haciendo cola para recibir bolsas de alimentos. Las inserciones en el mercado laboral ordinario se frenaron este mes de marzo con una tendencia a la baja. A partir del mes de junio apuntan leves signos de mejora con 43 personas insertadas, muy lejos pero de las 84 personas que encontraron trabajo el año pasado durante este mes. El cierre de empresas durante el confinamiento y los ERTOS han afectado la tarea de intermediación que llevamos a cabo. Las empresas han parado en seco la contratación y ha afectado a muchos sectores principalmente ámbitos como la hostelería y la restauración.
En Formació i Treball se han mantenido la mayor parte de los puestos de trabajo de inserción que se han convertido en esenciales durante esta crisis. Personal de limpieza, servicios logísticos, personal de cocina y lavandería, entre otros, han sido más necesarios que nunca para dar cobertura a los colectivos vulnerables que la entidad ha atendido durante los meses de confinamiento. La crisis y el paro de la actividad económica ha supuesto que muchas personas se hayan encontrado sin ingresos mínimos que garantizaran la adquisición de productos de primera necesidad. En este sentido los trabajadores y trabajadoras de inserción del Grupo Formació i Treball han sido claves para dar respuesta al crecimiento de la demanda de ayuda que ha recibido la entidad.
Hace falta una apuesta en firme por parte de entidades, administraciones públicas, empresas y ciudadanía para contribuir a la reconstrucción social que nos tocará hacer entre todos. El consumo con conciencia social será una práctica cada vez más recurrente. Hace falta ponerse en la piel del otro, todos podríamos haber sido la persona que necesita ayuda. La crisis nos ha permitido redescubrir valores como el cuidado, la escucha, la gratitud, la humildad, la solidaridad, la paciencia, la cooperación intergeneracional, la generosidad y la entrega, valores que extrañamente ocupan un lugar relevante en nuestra sociedad. Apostamos por ponerlos en práctica y avanzar juntos hacia un horizonte más optimista.
