El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha presidido el Pleno del Consejo Económico y Social de Barcelona (CESB), el primero de este mandato, acompañado por la concejala de Promoción Económica y Trabajo, y presidenta de Barcelona Activa, Raquel Gil.
El Pleno ha aprobado la memoria 2020-2022, presentada por el decano del Colegio de Economistas de Cataluña, Carles Puig de Travy, y la representante de la comisión ejecutiva, y miembro de CCOO, Aurora Huerga. El presidente del CESB, Francesc Castellana, ha informado sobre los trabajos realizados durante 2023, y las líneas de trabajo para 2024.
Al Pleno han asistido representantes de las organizaciones sindicales CCOO y UGT, y de las organizaciones empresariales PIMEC y Foment del Treball Nacional, así como personas expertas del mundo económico y social.
El alcalde Jaume Collboni ha explicado la necesidad de “reeconomizar las ciudades y aumentar la productividad para garantizar más oportunidades con mejores salarios y condiciones laborales; y abordar retos sociales de primer orden, como el de la evolución demográfica, la reducción de las desigualdades o garantizar el derecho al acceso a la vivienda”.
Jaume Collboni ha remarcado que “tenemos buenos datos macroeconómicos, pero hay personas con riesgo de exclusión social. Nuestro reto como Gobierno municipal es que el progreso económico llegue a todo el mundo”
El alcalde ha destacado que hay que abordar estos desafíos “desde una realidad metropolitana, con políticas comunes y soluciones compartidas, donde el Consejo Económico y Social de Barcelona está llamado a jugar un papel fundamental como organismo de referencia en el ámbito consultivo y de creación de opinión”.
Próximas líneas de trabajo para 2024
El Pleno del Consejo Económico y Social de Barcelona ha destacado estas líneas de trabajo para 2024:Crecimiento demográfico: favorecer un crecimiento demográfico sostenido y sostenible que comportaría un mayor equilibrio de los tiempos para trabajar y vivir, y disponer de unas condiciones vitales, económicas y ambientales que favorezcan historias de vida satisfactorias para todo el mundo.
Productividad: aumentar la productividad del sistema y por tanto una presencia competitiva en los mercados internacionales, con el objetivo de tener un saldo positivo en el comercio exterior y contribuir a rebajar el déficit público y los niveles de endeudamiento. Una economía sana con un crecimiento sostenido y sostenible es la condición necesaria para una buena economía.
Política pública y social de vivienda: establecer una política pública y social de vivienda que acompañe el crecimiento del mercado privado que permitan atender las necesidades de las personas y de los visitantes, sin desequilibrar los precios de la vivienda, un elemento muy importante para la renta más frecuente de la ciudadanía.
Política frente a las desigualdades: una política social que evite el crecimiento de las desigualdades y la pobreza, en la búsqueda del equilibrio social, especialmente para los niños por debajo de los umbrales de la pobreza, normalmente en familias monomarentales.
Memoria 2020-2022. Principales conclusiones
La pandemia ha puesto a prueba la estructura y la capacidad de la economía de Barcelona y la fortaleza de su cohesión social. Sus impactos han sido minimizados por un potente sistema sanitario dentro de la red pública y las medidas sociosanitarias impulsadas por las administraciones públicas, junto a un ejemplar comportamiento de la ciudadanía.
Barcelona es el núcleo central de la economía catalana y el motor de la ocupación de la región Metropolitana de Barcelona, una de las principales aglomeraciones de Europa y un sistema económico de primer nivel dentro de España.
En un contexto de estancamiento demográfico, se ha producido una reducción del desempleo, tanto del estimado como del registrado, y se acentúa el perfil de baja cualificación y larga duración entre las personas desempleadas. El período presenta ligeros aumentos de los salarios y de la renta disponible de los hogares, pero sin compensar la erosión de las rentas en una parte muy importante de la población.
Barcelona se integra al conjunto de la Región Metropolitana. Hacen falta políticas y actuaciones en esta escala, con una necesaria mejora en las infraestructuras para garantizar la movilidad obligada de las personas y el transporte de mercancías.
Persisten los desajustes de formación y cualificación profesional de una parte significativa de la población activa, aspecto capital para garantizar la cohesión social en la ciudad: el 60 % de las personas desempleadas no alcanzan niveles de formación superiores a los obligatorios (un 40 % sin el graduado de ESO), existen obstáculos para ofrecer oportunidades suficientes de formación profesional y hay niveles de abandono altos.
Destaca la importancia de la negociación colectiva para promover la reducción de las desigualdades de la promoción al acceso del trabajo y a la mejora de las condiciones salariales. En el tejido productivo los efectos de la crisis han tenido mayor impacto en las empresas micro, pequeñas y medianas, a pesar de la intervención y ayudas públicas.
Las desigualdades sociales y económicas, se han ampliado en los colectivos más desfavorecidos, entre otros, por razón de rentas. Los hogares monomarentales y el empobrecimiento infantil sitúan a las mujeres y los menores en los grupos más afectados en esta crisis.
Destaca la importancia de la formación de las personas y su derecho de ejercer el acceso a una vivienda digna como elementos esenciales preventivos de situaciones de pobreza y mayores desigualdades sociales y económicas.
El Consejo Económico y Social de Barcelona
El Consejo Económico y Social de Barcelona es un órgano consultivo, mediante el cual los agentes económicos y sociales más representativos y los representantes de la sociedad civil organizada participan en la toma de decisiones de las políticas sociales y económicas que afectan a la ciudad y a las personas que viven y trabajan.
Entre las funciones del CESB está informado de los proyectos municipales de planificación para la promoción social, económica y territorial, y elaborar dictámenes con carácter preceptivo del presupuesto municipal y las ordenanzas fiscales y la elaboración anual de la memoria socioeconómica de Barcelona con las consideraciones del CESB, que se ha presentado hoy.