Los Mossos d'Esquadra han detenido a dos hombres de 37 años como presuntos autores de varios robos violentos en establecimientos comerciales en Barcelona, cometidos durante el último mes. En uno de los hechos, los ladrones agredieron a clientes y trabajadores, y los obligaron a encerrarse en el almacén del establecimiento.
Según informan los Mossos d'Esquadra en un comunicado, los dos arrestados aglutinan más de una cuarentena de detenciones por hechos similares. Ambos han ingresado en prisión. Los detenidos se añaden a otro hombre de 28 años que fue arrestado a mediados de nombre acusado de participar en un robo. En su caso, quedó en libertad con cargos.
La investigación se inició cuando los agentes tuvieron conocimiento de un robo con violencia en un establecimiento de telefonía de Sant Martí, el 18 de noviembre. En aquel hecho, según explican los Mossos, actuaron dos ladrones que llevaban puestos cascos para esconder la cara, y accedieron al comercio con un arma de fuego y una de blanca.
Obligaron a las personas que estaban dentro del establecimiento a encerrarse en el almacén e incluso arrastraron a una de las víctimas por el suelo. Es en esta actuación que los Mossos detuvieron a una tercera persona por su presunta implicación en los hechos. Según la policía, este se dedicaba a alertar cuando era el momento idóneo para actuar a sus compañeros por teléfono. Los dos asaltantes huyeron del lugar.
A raíz de este hecho, un equipo conjunto de investigadores de varias comisarías identificó la identidad de los asaltantes e iniciaron un seguimiento policial. El 13 de diciembre, los agentes los detuvieron 'in fraganti' después de cometer un nuevo robo violento en otro establecimiento de telefonía, en este caso en Gràcia.
En este caso, también se ocultaron el rostro e hicieron uso de la violencia con armas blancas. En el registro, los agentes les intervinieron estas armas y una decena de móviles, tabletas, auriculares y otros aparatos electrónicos.
Los Mossos d'Esquadra añaden que durante la misma tarde del 13 de diciembre ya habían robado una motocicleta y habían violentado un bazar de Gràcia, donde golpearon al propietario. A pesar del seguimiento policial, consiguieron huir del lugar de los hechos, saltándose semáforos en rojo de varias calles. En el momento de la detención, los arrestados agredieron a uno de los agentes.
Los agentes localizaron varios teléfonos móviles relacionados con los robos en un lugar donde los Mossos tenían indicios de que los arrestados usaban para almacenar los efectos sustraídos. Los investigadores no descartan que los detenidos estén relacionados con otros hechos delictivos.
