Los Mossos d'Esquadra han detenido a tres aficionados más implicados en una pelea tumultuaria que tuvo lugar antes del partido entre el RCD Espanyol y el Real Oviedo en junio pasado.
La policía catalana, en una investigación conjunta con la española, habían detenido ya a principios de octubre a 17 aficionados vinculados con estos hechos. Ahora, se han realizado tres nuevas detenciones en Mataró, L'Hospitalet de Llobregat y Cunit.
El enfrentamiento consistió en lanzamientos de objetos entre los dos grupos aficionados y agresiones físicas mutuas, así como lanzamientos de sillas y botellas de las terrazas de los bares próximos, en el partido de vuelta en el que ambos equipos se jugaban el ascenso a la primera división.