Carlos Ruíz: "Viladecans es la segunda ciudad con menos riesgo de desigualdad de España"

27 de julio de 2022 a las 14:33h

Viladecans es una ciudad ubicada en la comarca del Baix Llobregat y forma parte del área metropolitana de Barcelona. En 2019, Viladecans comenzó su legislatura municipal con un equipo de gobierno cargado de proyectos para favorecer el aspecto del municipio pero, sobre todo, enfocados en las personas. La pandemia obligó a cambiar algunas planificaciones importantes, pero el resultado final es que Viladecans ha salido reforzada y muy bien enfocada hacia el futuro más inmediato. Su alcalde, Carlos Ruíz, lo explica en esta entrevista para La Ciutat.

Una vez superada la pandemia y ahora que Después de la pandemia, ¿cómo estáis en Viladecans?

Estamos bien y cumpliendo los compromisos del programa con el que ganamos las elecciones. Poco a poco se está notando la recuperación económica de Viladecans con proyectos importantes que tenemos en marcha como un nuevo hotel, algunas obras que estaban previstas, empresas que vienen a invertir en la ciudad.

La pandemia nos ha impulsado a desarrollar un proyecto muy importante de cuidado de la gente de Viladecans, que con la pandemia se reafirmó en la necesidad de trabajar con más cohesión, a buscar fórmulas para que la gente se sienta menos sola, con mecanismos para acompañarla. Todos estos proyectos están saliendo adelante.

Así pues, ¿la actividad está plenamente recuperada?

Sí, diría que en estos momentos tenemos actividad plena en Viladecans, incluso por encima de lo que esperábamos, con acción económica por parte de empresas que vienen a desarrollarse en Viladecans. Yo creo que la ciudad está yendo bien en muchos aspectos, a pesar de que la guerra de Ucrania nos ha trastornado a todos con efectos como el encarecimiento de la energía y una subida de precios que resulta preocupante porque los sectores más populares son los primeros que reciben las consecuencias.

El Ayuntamiento es la Administración más cercana a la ciudadanía y debe estar siempre al pie del cañón...

Empezamos la legislatura con muchos proyectos en los que estamos trabajando desde el primer día, como la naturalización de la ciudad con la ampliación del arbolado, el objetivo de ser una de las grandes ciudades europeas líderes en cero emisiones u otro muy importante, el proyecto "Viladecans me cuida" con la activación de un dispositivo de solidaridad, cohesión, sistemas de mutua ayuda de la gente para la gente o, por ejemplo, transformar los entornos de las escuelas para sacar las aulas a las plazas. Se trata de aspectos sociales y de ciudad que la pandemia ha evidenciado que son necesarias.

Por lo tanto, ¿se puede afirmar que Viladecans sale reforzada después de estos años tan complicados?.

Diría que sí. Viladecans sale de la pandemia y de la parálisis económica con mucho ímpetu, con mucha fuerza, con estos proyectos que nosotros llamamos vehiculadores necesarios. Ahora estamos trabajando 3, 4 acciones fundamentales para la ciudad, pensadas para todos y que signifiquen mucho en esta misión conjunta de todos a la hora de generar la dinámica social de cuidados, de solidaridad dentro de la ciudad y todo lo que tiene que ver con la revitalización y naturalización de la ciudad, el uso de los espacios públicos teniendo la educación como elemento central.

A menudo uno de los proyectos importantes de los ayuntamientos está enfocado en la descarbonización y el cuidado del medio ambiente. ¿Qué estáis haciendo en Viladecans en este sentido?

Queremos que Viladecans sea una ciudad con emisiones cero. Este objetivo no es sólo del Ayuntamiento sino de los ciudadanos y ciudadanas, teniendo claro que el Ayuntamiento solo no podrá alcanzar este objetivo. Somos muy conscientes de la parte de trabajo que tenemos que hacer nosotros invirtiendo en energías renovables, transformando los edificios para que sean climáticamente más eficientes, llenando las calles de árboles, porque estamos plantando entre 14.000 y 15.000 árboles más de los que tenemos ahora y con la vista puesta en el 2030, que es el plazo que tenemos para llegar a las cero emisiones. También hemos puesto en marcha la compañía Vilawatt que trabaja en materia de energía y suministra energía limpia y ayuda a los vecinos y vecinas de Viladecans a hacer comunidades energéticas, mejorar la eficiencia en los hogares y en las empresas y a trabajar en red compartiendo energía para poder hacer fórmulas nuevas de sinergias energéticas.

Otro aspecto muy importante de las ciudades suele ser la movilidad. ¿Qué puedes decir?

Efectivamente, ahora haremos una inversión muy importante en materia de movilidad gracias a las ayudas Next Generation, que nos harán dar un salto rapidísimo en esta materia. El objetivo de cero emisiones toca muchos aspectos que estamos ordenando en la ciudad. Esperamos que la Unión Europea nos reconozca dentro del grupo de 100 ciudades privilegiadas que trabajamos con este objetivo.

Hablando de los fondos Next Generation, Viladecans ha recibido 2 millones de euros para destinarlos a temas de movilidad, ¿cierto?

Sí, la movilidad sostenible tiene un elemento que diferencia mucho del sistema de antes, fundamentado básicamente en el coche privado y los combustibles fósiles. La cuestión fundamental es la posibilidad de escoger el medio más eficiente para moverse con menos emisiones. Esto implica todo un despliegue de tecnología, de aparatos de infraestructura como patinetes, bicicletas eléctricas, transporte público, muchísimas cosas que propondremos en los próximos años. Pasamos de coger simplemente el autobús a optar por el mecanismo de movilidad sostenible más al alcance, que seguramente será una bicicleta eléctrica o un vehículo compartido. Se trata de un cambio de filosofía fundamental. Ahora tendremos unos recursos extraordinarios para poner en marcha este despliegue enfocado en la innovación que nos permite trabajar con inteligencia artificial con cámaras, con sistemas para acompañar esta movilidad sostenible.

¿Qué es el Proyecto Camelot para fomentar la participación democrática y cívica?.

Es una iniciativa mediante la cual buscan mecanismos de participación para tratar los temas de mejora de la ciudad. Tenemos la suerte de que la Unión Europea ha escogido Viladecans como ciudad piloto que enseña a las otras ciudades cómo fomentar esta participación democrática. Entonces estamos teniendo mucha colaboración con otras ciudades de Europa para transferir nuestra capacidad de participación de la ciudadanía y hacer extensivos proyectos como el Vilawatt, por ejemplo. Me siento muy orgulloso porque la UE nos ha escogido como ciudad apta para hacer este trabajo de red, de transferencia de conocimiento para otras ciudades.

¿En qué consiste el proyecto de convivencia de Can Calderón?

Desde Can Calderón estamos trabajando mucho, en una parte de promoción económica de Can Calderón y la otra en ayudar a las personas, orientarlas en lo que sea posible en su itinerario profesional, porque muchas veces no es sólo aprender un oficio sino reforzar la autoestima de las personas, descubriendo las capacidades que tienen a partir de sus habilidades y aptitudes para desarrollar un determinado trabajo. Entonces practicamos una atención individualizada, especializada y a la medida de cada persona, trabajando muy directamente con la gente para potenciar estas capacidades y aumentando su autoestima.

Aparte de todas estas acciones, ¿cuál es el proyecto que al inicio de la legislatura dijiste, de este mandato no pasa?

Tenemos un montón de proyectos que están cociéndose, pero destacaré tres que, aunque son poco visibles, son importantísimos.

Uno es la transformación de las escuelas de Viladecans en aulas inteligentes. Lo estamos haciendo en primaria pero lo queremos hacer extensivo a todas las aulas de todos los centros de la ciudad. Queremos dotar de tecnología los centros para cambiar la forma de dar clases, de organizar la enseñanza. En paralelo estamos replantando los entornos de los centros para que la escuela pueda salir a dar clases en la calle, en el bosque, porque muchas escuelas tienen el privilegio de estar situadas al lado del bosque y cerca de la montaña. Esta es una característica de Viladecans: los grandes espacios que tenemos. Yo creo que este sistema da muchas oportunidades de futuro a los niños y niñas de nuestra ciudad. Este cambio educativo significa que se pueda trabajar en ambientes diferentes y que toda la escuela sea un entorno pedagógico. Ya estamos haciendo las obras en las primeras aulas que se transforman. Nuestras políticas en apoyo a la educación son 100% de Viladecans, donde todo el mundo debe tener las mismas oportunidades.

¿El segundo tema?

Es la capacidad de generar redes de solidaridad que se han creado a raíz de la Covid en las asociaciones de vecinos, de voluntariado, que ayudan a mejorar la calidad de vida de las personas que viven solas, que no tienen capacidad de acceder a algunos servicios de forma normalizada o que están en situación de riesgo, a las que debemos apoyar. Es una forma diferente de trabajar el cuidado, la protección y la solidaridad entre las personas.

Vamos al tercer tema...

Es un proyecto que tiene un recorrido de unos 3 años al final de los cuales debemos tener resultados. Se trata del plan de inclusión femenina en el deporte. El objetivo es igualar el número de deportistas masculinos y femeninos en los deportes de Viladecans e incrementar el número de federados dentro de la ciudad. Esto implica hacer más instalaciones y en un par de años doblaremos la capacidad de las instalaciones deportivas del municipio. Estamos hablando de una pista nueva en Can Barrufet y dos pistas nuevas en Can Sellarès.

Hay un hecho muy importante, que ha pasado desapercibido y que tiene mucho que ver con todo lo que hemos estado explicando hasta ahora. Viladecans es la segunda ciudad de España con menos desigualdad. El índice de desigualdad es muy lento porque tiene que ver con la renta de las personas y por lo tanto, no suelen producirse cambios rápidos. En Viladecans hemos dado un salto de muchas posiciones y de estar por debajo de las 10 o 15 ciudades de España hemos pasado a ser la segunda en muy pocos años. Yo creo que esto tiene mucho que ver con las políticas de educación, de trabajar mucho en nuevas ocupaciones en la ciudad, en empresas que tienen más valor añadido. Estoy convencido de que este salto tan importante se ha producido gracias a todo esto. Estoy muy orgulloso de que Viladecans sea la segunda ciudad de España con menos riesgo de desigualdad de nuestro país.