La acusada de matar a puñaladas a su cuñada y prender después fuego al domicilio en el que convivían en Torrelavega ha admitido los hechos a los policías que se presentaron en el lugar, a los que manifestó que habían tenido "una pelea" y que había "apuñalado" y "matado" a la hermana de su pareja.
Además, la procesada -que según la opinión de los agentes estaba "tranquila" y solo presentaba "pequeños cortes" en las manos-, habría "intentado decapitar" el cadáver, según uno de los efectivos que se encargó de la inspección ocular del piso y que ha destacado la cuestión de que el cuerpo tenía "veintitantas" puñaladas, algunas por el pecho "y a la altura del corazón", y también "un gran corte" en el cuello que apunta a esta posibilidad.