Este lunes, los catalanes que formarán parte de las mesas electorales del 14-F han comenzado a recibir la notificación en sus casas. En total, 17.361 personas entre presidentes, vocales y suplentes, que tendrán el deber ineludible de presentarse en el lugar indicado y atender sus funciones para que todos los ciudadanos puedan ejercer su derecho a voto. Aunque en plena tercera ola de la pandemia de Covid-19, muchos lo harán con temor a un posible contagio.
En el manual de instrucciones que han recibido los miembros de las mesas aparecen las directrices sanitarias que se aplicarán durante la jornada electoral. La Generalitat asegura que habrá gel hidroalcohólico suficiente para pasar el día en cada colegio y que a los presidentes y vocales se les entregará cuatro mascarillas y una pantalla facial.
Además, el Gobierno recomienda dividir el voto en tres franjas horarias diferentes según la situación sanitaria de cada votante. Así, de 9:00h de la mañana a 12:00h del mediodía propone que voten los colectivos vulnerables, de 12:00h a 19:00h que lo haga el grueso de la población que no esté en riesgo y entre las 19:00h y las 20:00h que acudan los positivos de coronavirus y contactos estrechos. Durante esa última hora, los miembros de las mesas deben colocarse un equipo de protección (EPI). Para el recuento deberán usar una mascarilla FFP2 y guantes.
El Ejecutivo propone también tomar la temperatura a todos los miembros de las mesas electorales antes de la constitución de las mismas, a las 8:00h de la mañana, y someter a estas personas a un test de antígenos. Para asegurar que corren el menor riesgo posible, deberán sentarse manteniendo una distancia mínima de 1,5 metros entre ellos y las salas deben ser tratadas continuamente. No podrán tocar los DNI de los electores, que deberán mostrar la documentación dejando sobre una bandeja. Unos votantes, por cierto, a los cuales la administración pide que lleven el voto preparado de casa.
