Desde hace algunos años varios estudios nos alertan de lo perjudicial que resulta la contaminación, no solo para el medio ambiente, sino también para nuestro propio organismo... y también para el de las nuevas vidas que traemos al mundo.
Según la doctora Shanna Swan, profesora de medicina ambiental y salud pública de la escuela de medicina Mount Sinai (Nueva York), la polución está provocando el encogimiento de los penes de bebés. Así lo explica en su libro Count Down ('Cuenta atrás') en el que presenta un estudio alarmista para el futuro de la humanidad.
Su investigación comenzó en el año 2000 experimentando con ratas las consecuencias del síndrome ftalatos. Una sustancia formada por compuestos químicos que se utiliza para la fabricación de plásticos y que es muy común encontrarla en juguetes, envases o productos cosméticos entre otros. Estar expuesto a esta sustancia puede generar problemas hormonales que afectan al sistema endocrino y por tanto que provoque malformaciones en el feto.