El Parc Sanitari Sant Joan de Déu ha introducido el uso de videollamadas entre aquellos pacientes que tienen covid-19 y sus familiares. Es una de las medidas principales que ha aplicado el ente en el Hospital de Sant Boi y en los centros de la Red de Salud Mental para facilitar el contacto entre ingresados y el entorno más cercano después de que a mediados de marzo se restringieran las visitas. En este sentido, se ha puesto en marcha el Equipo de Apoyo Psicosocial y Espiritual, con profesionales centrados en las unidades asistenciales y otros dedicados a la atención telemática. Las videollamadas se están priorizando en el caso de enfermos terminales, los cuales reciben la ayuda de un profesional para poder hablar con la familia en los últimos instantes de vida. Aparte de facilitar las comunicaciones entre pacientes y familiares, el Equipo de Apoyo Psicosocial y Espiritual se centra en hacer intervenciones psicológicas "que permitan aflorar planteamientos de final de vida y conversaciones con sentido", destacan desde el Parc Sanitari. Posteriormente, a través de visitas telemáticas, acompañan emocionalmente a los familiares y hacen seguimiento de aquellos que están más afectados por la pérdida y la situación de crisis sanitaria y social.
Por otro lado, en lo que respecta a los diversos centros de la Red de Salud Mental del Parc Sanitari Sant Joan de Déu, los profesionales de este ámbito también trabajan para que las personas atendidas que no pueden recibir visitas y que no tienen teléfono móvil puedan realizar videollamadas con los familiares mediante el uso de tabletas.
Por otra parte, en las residencias que atienden a personas con discapacidad intelectual y la Unidad de Hospitalización Especializada para Personas con Discapacidad Intelectual (UHEDI), cada día se realizan sesiones de videollamadas.
