Los Mossos d'Esquadra han desmantelado un clan familiar que controlaba parte del tráfico de cocaína y marihuana en el barrio de la Marina del Port Vermell, en Sants-Montjuïc. Se trata de una organización criminal que se dedicaba tanto al cultivo como al tráfico de la droga. La investigación se inició en junio, cuando fruto de otra investigación en La Mina se pudieron establecer conexiones familiares y delictivas entre el grupo desmantelado entonces y otro en Sants.
Los Mossos constataron que este clan se dedicaba a la venta, distribución al por mayor y cultivo intensivo de marihuana en pisos y naves industriales. El grupo podía llegar a conseguir trimestralmente casi 60 kilos de marihuana, que podían suponer más de 400.000 euros en el mercado ilícito.
El grupo tenía una marcada estructura organizativa. Los policías comprobaron también que la organización se dedicaba inicialmente a la venta de cocaína al detalle pero había ampliado esta parte del negocio con la compraventa de esta sustancia al por mayor, con la inversión de parte de las ganancias obtenidas de la distribución de marihuana. El 1 de marzo se llevó a cabo un operativo policial que permitió detener a 17 personas, de los cuales diez hombres y siete mujeres, todas de nacionalidad española, a excepción de una que era de nacionalidad argentina. Más de 2.000 plantas intervenidas La investigación también permitió desmantelar cuatro plantaciones de marihuana, donde se intervinieron más de 2.000 plantas. Se hicieron 12 entradas y registros en los domicilios de los detenidos. En los registros los agentes intervinieron 588.300 euros en efectivo, cuatro armas de fuego, diferentes cantidades de cocaína, la mayoría en dosis para la venta al detalle, y sustancia de corte para rebajar su pureza. Después de pasar a disposición policial, ocho de los arrestados ingresaron en prisión.
