Desde el pasado jueves, 21 de mayo, es obligatorio llevar mascarillas en la vía pública, en los espacios al aire libre y en lugares cerrados de uso público, siempre y cuando no se pueda mantener una distancia de seguridad de dos metros entre personas.
Solo aquellas personas mayores de 6 años deben llevarla.
Las mascarillas quirúrgicas o higiénicas, las más recomendadas para la población, no se deben utilizar más de ocho horas. Por cuestiones de comodidad e higiene, se suele recomendar no usarlas más de cuatro horas seguidas.
Estas mascarillas quirúrgicas normalmente son de un solo uso, pero con la situación actual, que no hay muchas, se reutilizan. Por eso hay que guardarlas siguiendo las recomendaciones del fabricante y los pasos indicados.
Sin embargo, los expertos recomiendan que, en caso de que la mascarilla se humedezca o se deteriore por el uso, sea sustituida inmediatamente por otra. Según los expertos, se deben conservar en una bolsa transpirable o en un sobre de papel, nunca en un bolso de mano o un bolsillo, que son vectores de contaminación. Además, se recomienda evitar bolsas de plástico. Para guardarlas, hay que ser siempre conscientes de que no se debe tocar la parte externa porque puede estar contaminada.