La factura del agua de Barcelona es la más cara del Estado, según un estudio elaborado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). En concreto, el recibo anual para un hogar de tres o cuatro personas (175 metros cúbicos) en la capital catalana asciende hasta 520 euros al año.
Lleida, con 442 euros de media; Tarragona, con 435 euros; y Girona, con 328 euros; también superan la media estatal, que se sitúa en 306 euros, según los cálculos de la OCU. La organización de consumidores ha lamentado la disparidad de precios entre ciudades y ha denunciado, además, que la política tarifaria de muchos municipios "no fomenta el ahorro de agua" porque los costes fijos del servicio son "muy altos".
Las cifras de todas las capitales catalanas contrastan con Guadalajara, donde se registra la tarifa más barata del Estado, de 164 euros. La OCU también ha denunciado que en Lleida la factura se ha encarecido un 13,5% respecto a 2020 y en Girona un 10,7%. En Madrid la factura se sitúa en 253 euros al año.
En cuanto a la diferencia de tarifas, el estudio alerta de que se puede llegar a pagar el triple por el mismo consumo en ciudades diferentes. En este sentido, la OCU critica que los municipios cobren cantidades diferentes por el saneamiento del agua, elemento "difícilmente justificable" teniendo en cuenta que las tareas de una empresa depuradora "no deberían diferir mucho de un lugar a otro".
Después de todo, la organización ha pedido una "harmonización" de las tarifas y que sean "transparentes, comparables y sencillas". Asimismo, teniendo en cuenta el contexto de sequía, ha apostado por penalizar el consumo excesivo de agua.
